Gabriela Martín Del Campo Ross es una Life Coach certificada que cuenta con varios años de trayectoria en los medios de comunicación en Arizona. Escríbale a gabriela1135@gmail.com.
¿Por qué es tan importante fijar metas? Sencilla y directa la respuesta: Porque sabes tu rumbo; sin metas fijas, no tienes enfoque, no llegas a visualizar y reconocer tus oportunidades.
Sin rumbo puedes pasearte durante días, meses y años de tu vida sin ningún propósito. ¿Vives? Si… pero sin ver tu vida a plenitud.
Tener una meta te inspira, motiva, alegra, da energía, te hace sentir que vives con química viva, radioactiva.
Cuando tomas una decisión, la centras, y más si le pones fecha específica; la mente subconsciente empieza a trabajar, jugar con ideas y desarrolla estrategias para poder lograrlas… ahí es cuando sale tu plan de acción.
Quiero abrir un paréntesis y decir que NUNCA es tarde para identificar tus metas, localizarlas y ver la gasolina de tus propósitos.
Tranquilos, no pasa nada si no las tienes en el aquí y ahora, pero no lo dejes, piensa en el allá y entonces.
Nuestro subconsciente es una herramienta extremadamente poderosa. Cuanto más seguido recuerdes tus metas, más tu mente trabajará en formas para lograrlo.
Y aquí les va un consejo: Meditar a diario te ayudará a conectarte con tu subconsciente y es ahí donde tienes respuestas claras y precisas.
¿Por dónde empezar?
Fácil. Después de meditar, visualiza tu vida, tus acciones… toma un lápiz y papel y hazte preguntas sencillas pero poderosas como: ¿Qué siento sobre lo que llevo en este año? ¿Cómo me siento? ¿Qué es lo que he hecho que me hace sentir más feliz? ¿Estoy orgulloso de mi mismo? ¿De qué estoy agradecido?
Este tipo de preguntas hazlas para todas las áreas de tu vida, como por ejemplo: lo económico, laboral, personal, social… como dicen por ahí en salud, dinero y amor.
Lo importante es que dividas tu vida en todas las áreas importantes para ti y veas los valores que tienes. Para ello eso te enfocará, te llevará al logro de tus metas y te sentirás más organizado, más feliz y más pleno.
Me despido con una acción que me gusta mucho: La única manera de corregir cosas malas de tu pasado, es añadir más cosas buenas a tu futuro.