Toronto.- El Museo Bata Shoe de Toronto está por cumplir 20 años con la exhibición de más de 13 mil zapatos de varias épocas, culturas, países y costumbres.
Aquí se exhiben miles de zapatos que han acompañado el paso de la historia: sandalias, botas, con tacón y plataforma. Zapatos cómodos, exóticos, de tortura y adecuados a las necesidades terrenales. Lo mismo zapatos de paja que de hierro, de madera o de pieles adornados con chaquira.
Este museo, localizado en el centro de Toronto, es el más grande en su tipo de Norteamérica y fue fundado por el matrimonio Sonja y Thomas Bata en 1995, luego de 16 años de coleccionar y estudiar zapatos de todo el mundo.
Thomas conocía el oficio de fabricar zapatos y Sonja coleccionaba y estudiaba el calzado usado a lo largo de la historia. La pareja viajó por el mundo coleccionado un sin fin de zapatos hasta que creó una fundación en 1979 que investiga estos objetos.
“Los zapatos reflejan la diversidad de necesidades según la cultura, la religión y la época”, expresó la coleccionista.
El museo de cinco pisos tiene exposiciones semipermanentes e itinerantes en las cuales exhibe desde sandalias egipcias hasta micro zapatillas chinas, así como una amplia gama de botas usadas por los mongoles, tibetanos, inuit, esquimales e indígenas de Norteamérica.
Mediante una amplia variedad de zapatos, este museo demuestra cómo a través de los años el usar protección para los pies se fue transformado de una necesidad hasta una vanidad para marcar diferencias sociales, estatus, estilo de vida.
Aquí se exhiben las sandalias del Dalai Lama, las botas del ex primer ministro británico Winston Churchill, las zapatillas de la Reina Victoria (1840), la bota del primer astronauta, así como los zapatos de artistas famosos.
Las botas psicodélicas de amplia plataforma que usó Elton John a mediados de los años 70, las botas que usó John Lennon a principios de los 60´s, los zapatos de charol blanco y azul de Elvis Presley, las zapatillas rojas que Madonna usó en 1993.
“No sé quién inventó los tacones pero todas las mujeres se lo debemos”, expresó alguna vez Marilyn Monroe, cuyas zapatillas rojas se exhiben aquí junto con las plateadas de Elizabeth Taylor. También están aquí las botas de Robert Redford y los zapatos negros del elegante Pierce Brosnan, el agente 007 en 1999.
El calzado de egipcios y romanos, de la época barroca y del rococó, del judaísmo, hinduismo, budismo y cristiandad. Todo ese calzado de grupos religiosos, indígenas, esquimales y de la alta burguesía se exhibe en este museo que sólo cierra dos días al año.
La curadora Elizabeth Semmelhack, quien trabaja aquí desde hace 15 años, estudia detenidamente cada colección para crear una nueva exposición.
“Nunca me imaginé todo lo que aprendería de la historia de la humanidad y de las costumbres de cada comunidad a partir del estudio de los zapatos”, dijo a Notimex. El próximo 6 de mayo el Bata Shoe Museum cumplirá 20 años de existencia, para lo cual prepara una celebración especial.