Las Vegas.- Donald Trump logró su tercer triunfo seguido con una decisiva victoria el martes en las asambleas republicanas de Nevada, mientras Marco Rubio trataba de adelantar a Ted Cruz para hacerse con el segundo puesto en una carrera cada vez más urgente por poner freno al fenómeno Trump.
El magnate puede ahora presumir de victorias en el oeste, el sur y el nordeste del país, lo que demuestra su gran atractivo entre los votantes descontentos que han hecho oír su voz en la campaña electoral para 2016.
“Estamos ganando, ganando, ganando el país”, dijo Trump. “Pronto, el país empezará a ganar, ganar, ganar”.
Tras enumerar una lista de estados que celebran pronto sus primarias y donde lidera los sondeos, Trump predijo que pronto podrá reclamar la candidatura republicana para la presidencia.
“Van a ser dos meses increíbles”, dijo ante un entusiasta público en un casino de Las Vegas. “Amigos, para ser sincero puede que ni siquiera necesitemos los dos meses”.
Seis de cada 10 asistentes a las asambleas republicanas en Nevada dijeron estar descontentos con el funcionamiento del gobierno, y Trump consiguió en torno a la mitad de esos votantes airados, según los resultados preliminares de un sondeo a pie de urna.
El tiempo empieza a acabarse y Nevada era una prueba clave para Rubio y Cruz, los dos senadores que luchan por alzarse como alternativa clava al favorito de las encuestas. Rubio debía mostrar que puede aprovechar el impulso de los últimos días, mientras que Cruz buscaba un destello que le ayudara a recuperarse de un bache en su campaña.
Muy por detrás de los dos senadores quedaron el gobernador de Ohio John Kasich y el neurocirujano retirado Ben Carson.
Rubio, que ya estaba de campaña en Michigan cuando se conocieron los resultados de Nevada, trató de transmitir confianza en que puede consolidar a los votantes que no apoyan a Trump, y que se han visto divididos entre una serie de aspirantes republicanos. “Tenemos un margen increíble para crecer”, afirmó.
Pero tras terminar tercero en Iowa, quinto en New Hampshire y segundo en South Carolina, Rubio necesita ganar pronto para reforzar la idea de que puede ganar a Trump.
Cruz, un combativo conservador popular entre los votantes a la derecha del partido, quedó en un decepcionante tercer puesto en South Carolina tras pasar buena parte de las dos semanas previas negando que hubiera empleado tácticas de campaña poco éticas y defendiendo su integridad. Otro resultado decepcionante en Nevada plantearía nuevas dudas sobre sus posibilidades antes del Súper Martes, como se conoce la cita del 1 de marzo cuando varios estados celebran sus primarias.
El calendario electoral sugiere que si los rivales de Trump no le frenan para mediados de marzo, puede que nunca lo logren. Trump se llevó los 50 delegados de South Carolina, dándole un total de 67 frente a Cruz y Rubio, que tienen 11 y 10, respectivamente. En Nevada había 30 delegados en juego, y una semana más tarde se asignarán nada menos que 595 en la locura del Súper Martes.