La campaña busca catapultar el número de votantes latinos en estados clave del país. Foto: Archivo
Diversas organizaciones de California intensificaron acciones para atraer a nuevos electores, como parte de un proyecto denominado “Un millón de votantes”.
En el proyecto participan organizaciones comunitarias como la Coalición por los Derechos Humanos de Inmigrantes de Los Ángeles (CHIRLA), California Calls, la Red Asia Pacífico por el Medio Ambiente (APEN) y la Alianza de los Californianos por el Empoderamiento de la Comunidad (ACCE), entre otras.
La dirigente de CHIRLA, Angélica Salas, anunció que su movimiento buscará inscribir una meta de 10 mil nuevos votantes de aquí a octubre próximo.
En California, especialistas y organizaciones estiman que hay siete millones de personas que pueden registrarse para votar, de las cuales cuatro millones 700 mil son latinos.
“Nuestra campaña está enfocada en inscribir hijos de inmigrantes que ya son ciudadanos, jóvenes latinos y afroamericanos que son los que no se han registrado como votantes cuando lo pueden hacer”, remarcó Salas.
CHIRLA tiene unos 800 voluntarios que saldrán a las calles, mercados, festivales, campus universitarios y tocarán puertas en la búsqueda de aquellos que califican para registrarse y votar en las elecciones presidenciales del 8 de noviembre próximo.
Para las pasadas elecciones primarias en California se registraron 220 mil nuevos demócratas, casi un 3.0 por ciento de su número de personas registradas, que alcanzan los 7.7 millones en el estado.
Mientras que en el bando republicano se incrementaron unos 70 mil, lo que representó el 1.45 por ciento del total de sus registrados, que llegan a 4.8 millones en California.
En cuanto a las personas sin afiliación política -que ha sido el grupo más grande en registrarse en los últimos años-, la cifra cayó por unos 20 mil votos, para quedar en 4.1 millones.
Desde hace dos décadas, California es abrumadoramente de mayoría demócrata y por esa razón aspirantes presidenciales prácticamente se olvidan de hacer aquí campañas políticas, al considerar que el espectro político es inamovible.
Las organizaciones locales impulsan diferentes jornadas comunitarias y foros con el fin de llenar solicitudes de ciudadanía de forma gratuita, de modo que se incremente el número de nuevos votantes.
En California, los nuevos ciudadanos tienen que terminar el trámite antes del 24 de octubre próximo, porque es el plazo para registrarse y votar en las elecciones, en las que se definirá al sucesor del presidente Barack Obama, quien entregará el poder en enero de 2017.
Algunas organizaciones no lucrativas en California ofrecen talleres gratuitos y otros financian los costos para los solicitantes.
El grupo filantrópico “Juntos Podemos” ha invertido tres millones 200 mil dólares en asistir a personas que desean tramitar su ciudadanía.
El alcalde de Los Ángeles, Erick Garcetti, lanzó a principios de este año una ambiciosa campaña de promoción para trámites de ciudadanía.
“El odio, la discriminación, el racismo y el ‘Trumpismo’ no son mis valores, ni los de mi país”, declaró en su momento el alcalde, con raíces judías y de abuelos mexicanos.