Washington.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, aseguró hoy que no existen evidencias de que el responsable de la matanza en Orlando haya sido dirigido desde el exterior o formado parte de un mayor complot por parte del grupo Estado Islámico (EI).
Obama dijo que hasta ahora todo apunta a señalar que el responsable de la peor matanza en la historia del país se radicalizó a través de redes sociales en Internet, además de haber tenido un fácil acceso a armas de fuego por no contar con antecedentes criminales.
“En esta etapa no vemos una clara evidencia de que él fue dirigido de manera externa; parece que al último minuto anunció su lealtad al ES, pero no hay evidencia por ahora de que fue dirigido externamente”, dijo.
Al hablar con reporteros al término de su reunión con su equipo de seguridad nacional, Obama señaló que tampoco existe evidencia de que Omar Mateen haya sido parte de un complot mayor “y parece ser similar a lo que vimos en San Bernardino, pero no lo sabemos aún”.
“Parece que el pistolero fue inspirado por diversas informaciones extremistas diseminadas en Internet, todos esos materiales están siendo revisados de manera que podamos tener un mejor entendimiento de la senda que tomó el asesino al decidir lanzar este ataque”, indicó.
Acompañado por el vicepresidente, Joe Biden, Obama indicó que este es el tipo de extremismo doméstico que ha sido motivo de preocupación de las autoridades desde hace tiempo, y evidente con más frecuencia en anos recientes.
El mandatario aludió igualmente a la relativa facilidad con la que Meteen adquirió las armas utilizadas para llevar a cabo el ataque que dejó 49 víctimas fatales y otras 53 personas heridas.
“Parece que el pudo comprar estas armas legalmente porque no tenía antecedentes criminales que se lo hubiera prohibido. Parece que no le fue difícil obtener estas armas”, indicó.
El mandatario consideró empero que este incidente debe llevar a una reflexión sobre lo laxo que resultan los actuales controles sobre armas de fuego, al facilitar su acceso.
Las autoridades han indicado que en el ataque el pistolero utilizó un rifle de asalto RA-15, cuya compra estuvo prohibida por diez años hasta el 2004, además de una pistola semiautomática de nueve milímetros.