Barack Obama confió en que la relación de su país con otros gobiernos pronto será mejor. Foto: AP
Washington.- Estados Unidos anunció hoy que trabajará con México y Canadá para mejorar la competitividad en Norteamérica e impulsar la prosperidad en el hemisferio, así como para consolidar los avances logrados frente a las amenazas derivadas de la debilidad institucional y el crimen organizado.
Al presentar la Estrategia Nacional de Seguridad 2015, el presidente Barack Obama confió que el cambio de política con Cuba tras el restablecimiento de relaciones diplomáticas en diciembre pasado, mejorará la interacción de Estados Unidos con otros gobiernos en la región.
“Nuestra apertura hacia Cuba mejorará nuestra capacidad de trabajar en nuestro propio hemisferio, donde existen enormes oportunidades para consolidar los avances en la búsqueda de paz, prosperidad, democracia y seguridad energética”, indicó.
El documento establece que Estados Unidos continuará impulsando un hemisferio que sea próspero, seguro, democrático “y que juegue un mayor papel global”, haciendo notar los avances que la región ha registrado para reducir la pobreza por primera vez en su historia.
De igual manera destacó la creciente relevancia que la región está jugando en el frente energético como una importante fuente de suministro.
Pero hizo notar que estas ganancias, “están siendo puestas en riesgo por instituciones débiles, altas tasas de criminalidad, grupos del crimen organizado más fuertes, el tráfico de drogas, persistentes disparidades económicas e inadecuados sistemas de educación”.
“Para hacer frente a estos retos estamos trabajando con Canadá y México pata mejorar nuestra competitividad colectiva a la vez que impulsamos la prosperidad en nuestro hemisferio”, señaló.
En el marco de estos esfuerzos, la estrategia incluye la conclusión de las negociaciones junto con México, Chile, Perú y Canadá, para el establecimiento del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP), a la vez que se buscará una mayor cooperación económica con Brasil.
Al amparo de esta estrategia, Estados Unidos dijo que promoverá un sistema interamericano de derechos humanos más fuerte, para lo cual ha venido ampliando la colaboración con países en la región.
“Tal colaboración es especialmente importante en países vulnerables como Guatemala, El Salvador y Honduras, donde las instituciones de gobierno son amenazadas por los sindicatos del crimen”, apuntó.
El documento indicó que esa debilidad institucional y auge de la criminalidad ha sido uno de los factores detrás del aumento exponencial de los cruces de menores indocumentados que viajan solos, lo que el año pasado provocó una crisis humanitaria en la frontera de Texas con México.
Como parte de esta estrategia, Estados Unidos apoyará la resolución de conflictos regionales, destacando en particular la conclusión de las negociaciones de paz entre el gobierno de Colombia y las guerrilleras Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
De la misma manera, añadió, Estados Unidos continuará del lado de los ciudadanos en aquellos países donde el completo ejercicio de la democracia “este en riesgo” como en Venezuela.
“Aunque algunos países de la región continúan rehenes de debates ideológicos, vamos a continuar trabajando con gobiernos que están interesados en cooperar con nosotros para reforzar los principios contenidos en la Carta Democrática Interamericana”, enfatizó.