El número de personas dispuestas a comprar regalos por menos de 10 dólares en esta temporada ha aumentado a 4% comparado con 1% el año pasado, según un estudio del America’s Research Group. Foto: AP

Nueva York.-  Muchos consumidores están comprando regalos baratos en estas navidades. Ya desde la recesión existía la tendencia de ser más reservados a la hora de desembolsar dinero, buscando ofertas y precios especiales. Pero ahora, la tendencia va más allá.

Los consumidores están ahora dispuestos a comprar obsequios que en otras épocas hubieran descartado por ser demasiado simples. Ya no se trata de buscar productos de marca a buen precio; se trata de ir con la idea de comprar cosas baratas que en el pasado no se les hubiera ocurrido comprar.

El número de personas dispuestas a comprar regalos por menos de 10 dólares en esta temporada ha aumentado a 4% comparado con 1% el año pasado, según un estudio del America’s Research Group, una firma que mide las tendencias de los consumidores. Entretanto, la cantidad de gente dispuesta a gasta entre 26 y 35 dólares bajó de 22% a 18%.

En general se estima que el público hará compras más modestas en esta temporada festiva. La Federación Nacional de Minoristas vaticina que el dinero gastado en compras de regalos entre noviembre y diciembre aumentará 3,7% a 630.500 millones de dólares este año, comparado con 4,1% el mismo periodo del año pasado.

Jana Montero, que en otras navidades ha regalado cosas como iPods y tablets, ahora ha cambiado de parecer: estas navidades regalará juegos de platos y candelabros que cuesten menos de 30 dólares.

Montero, residente de Nueva York y quien está ahorrando dinero para comprar una casa con su esposo, dijo: “Queremos estar seguros de que estamos siendo conscientes sobre nuestros gastos”.

El cambio de actitud se debe en parte a la situación económica, dijo Jeff Green, un experto en ventas en Phoenix. Los consumidores que estaban atentos a su presupuesto durante la recesión continúan sintiendo la presión aun cuando la economía está mejorando. “Aun cuando el desempleo ha bajado, no creo que la gente se siente segura en sus puestos de empleo”, comentó Green.

Pero a la vez es una evolución de la psicología del consumidor. Algunos se han vuelto escépticos ante las promesas de las grandes tiendas de que han rebajado sus precios, considera el experto en ventas Paco Underhill. Es decir, la gente está empezando a dudar si están pagando el precio justo por un producto, y es por ello que ahora empiezan decidiendo que comprarán algo realmente barato.

“Uno de las grandes interrogantes de la psicología del consumidor es: ¿cuánto realmente vale algo?”.