En Estados Unidos, las primeras tiendas que abrieron fueron las ubicadas en la costa este, antes de las 8:00 horas locales, y poco después en el resto del país, con cientos de personas esperando en fila en cada una de ellas, algunos incluso desde hace unos días.

Apple abrió el periodo de pre pedidos para los nuevos iPhone el pasado viernes, registrando un récord de cuatro millones de órdenes en las primeras 24 horas, a pesar de que los precios más bajos de los teléfonos sin contrato con alguna compañía telefónica se ubicaron en 649 dólares para el iPhone 6 y 749 dólares para el iPhone 6 Plus.

Bajo el plan de dos años de contrato que ofrecen las telefónicas, los teléfonos cuestan 199 dólares y 299 dólares, respectivamente.

Hoy en la tienda de Apple en el Centro Comercial Stonebriar en Frisco, un suburbio al norte de Dallas, los empleados atendían a los clientes en dos filas; una para los que ya lo había ordenado a lo largo de la semana y la otra para quienes acudían a comprarlo en ese momento.

“Vamos a atender a quienes llegan buscando un teléfono, hasta que se acaben los que nos han llegado”, dijo Kevin Facio, empleado de la tienda. “Desconozco cuantos tenemos en inventario, pero tenemos muchos”, dijo.

El nuevo iPhone 6 viene dotado con una pantalla de 11.9 centímetros (4.7 pulgadas) y el iPhone 6 Plus con una aún más grande de 11.9 centímetros (5.5 pulgadas).

Ejecutivos de Apple informaron que los nuevos teléfonos vienen con muchas mejoras, incluyendo procesadores más rápidos, una pantalla más nítida, mejor duración de la batería y mejora en el rendimiento de la cámara.

La actualización más notable en el iPhone 6 son las pantallas más grandes en ambas versiones, en una muestra de que Apple cedió a la tendencia encabezada por competidores como Samsung que han hecho de las pantallas más grandes una característica estándar en sus teléfonos.

Ambos teléfonos contarán con el nuevo sistema de pago electrónico de Apple, el denominado “Apple Pay”, que podría con el tiempo hacer obsoleta a la tarjeta de crédito.

Apple Pay podrá ser usado con los sistemas de pago electrónico de las mayores compañías de tarjetas de crédito, como American Express, MasterCard y Visa.

El sistema estará basado en la comunicaciones de campo cercano o radio frecuencia (RFID), una tecnología ampliamente adoptada, y utilizará la huella digital del usuario para identificarlo.