Washington.- Los republicanos aprobaron el viernes un plan presupuestario en el Senado, lo que encamina al Congreso a meses de batallas con el presidente Barack Obama en torno a los planes del partido de recortar gastos y desmantelar la ley de salud del mandatario.
Los senadores, que trabajaron hasta las primeras horas del viernes, aprobaron el plan en una votación de 52-46 que se definió prácticamente de acuerdo a las líneas partidistas, con lo cual respaldaron una medida que se asemeja mucho a una aprobada por la Cámara de Representantes el miércoles. Ambos planes presentan una visión conservadora para reducir déficits fiscales proyectados por más de cinco billones de dólares en la próxima década, principalmente con recortes a la salud pública y otros programas de prestaciones sin aumentar impuestos.
El Senado entró en su receso de abril tras aprobar la medida, y ahora las dos cámaras bajo control republicano tendrán que negociar un plan presupuestario común a mediados del mes. La legislación es un plan no vinculante que no requiere la firma de Obama, pero sienta las bases para futuras propuestas de ley que parecen destinadas a vetos presidenciales.
“Los republicanos han mostrado que el Senado está bajo un nuevo liderazgo y cumpliendo con el cambio y el gobierno responsable que el pueblo estadounidense espera”, dijo el líder de la mayoría, Mitch McConnell, de Kentucky.
Pero los demócratas ven el documento de forma diferente, y dijeron que se apoya en trucos y prioridades erróneas.
“El presupuesto aprobado hoy es irresponsable y no invierte efectivamente en nuestro futuro”, dijo la senadora demócrata Barbara Mikulski, de Maryland.
El tono ideológico del plan contrastó con una propuesta bipartidista aprobada abrumadoramente por la cámara baja el jueves que bloquea permanentemente los recortes perennes en los honorarios pagados a los médicos por el programa Medicare. Esa medida tendrá que esperar también hasta mediados de abril para su aprobación final en el Senado, aunque McConnell ha dicho que su cámara la manejará “muy prontamente cuando regresemos”.
Aunque los médicos enfrentan un recorte del 21% en sus honorarios del Medicare a partir del 1 de abril, el gobierno puede demorar procesar dichos pagos hasta que el Congreso regrese a laborar. La medida, que también proporciona dinero para programas de cuidado de la salud infantil y personas de bajos ingresos, sería financiada en parte con primas más elevadas a las personas con los mayores ingresos dentro de las que gozan de servicios del Medicare.
Sobre el plan presupuestario, solamente dos republicanos votaron en contra: Ted Cruz de Texas y Rand Paul de Kentucky, un par de aspirantes a la candidatura republicana a la presidencia. Otros dos candidatos potenciales de ese partido, Marco Rubio de Florida y Lindsey Graham de Carolina del Sur, votaron por el sí.
Todos los demócratas se opusieron.
Fue aprobada también una propuesta de McConnell dirigida a frustrar las gestiones de Obama para reducir las emisiones por el uso de carbón.