Washington.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció una serie de órdenes ejecutivas para el control de armas, entre ellas la revisión de antecedentes criminales de compradores potenciales en internet, ferias ambulantes o mediante empresas.
Las medidas, que podrían ser disputadas en las cortes por sus opositores, buscan prevenir más de 100 mil muertes de personas por armas de fuego en la última década, miles de suicidios y lesiones.
“Se trata de un sistema de revisión de antecedentes criminales para hacerlo más eficiente y evitar que malas personas tengan acceso a armas de fuego”, explicó la procuradora de Justicia, Loretta Lynch.
Sólo en diciembre, la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) tramitó más de tres millones de peticiones de revisión de antecedentes, la mayor cifra desde los ataque a la escuela primaria en Newtown, Connecticut. En todo 2015 fueron 22 millones de revisiones.
Lynch señaló que como parte de las acciones ejecutivas, el FBI incrementará 50 por ciento el personal asignado a la revisión de antecedentes.
El objetivo es que el FBI cuente con un sistema de revisión que opere las 24 horas del día, siete días a la semana, y que además pueda notificar a las autoridades en tiempo real cuando detecte un intento de compra ilegal de armas.
Como parte del presupuesto del año fiscal 2017, el presidente solicitará una partida especial de 200 millones de dólares para incrementar el personal de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF).
Lynch señaló que las reglas dejarán en claro que todas las personas que venden armas, así sea en pequeña escala en un mercado ambulante, deben quedar sujetos a las regulaciones.
La Casa Blanca pedirá además un presupuesto especial de 500 millones de dólares para incrementar las inversiones en acceso a salud mental.
Asimismo el presidente instruyó a los Departamentos de Defensa y Seguridad Nacional a explorar tecnología de punta para contar con armas más seguras, toda vez que muchas de las muertes por armas de fuego son accidentales.
“Adoptados conjuntamente estos pasos tienen la capacidad de hacer a nuestras comunidades más seguras”, dijo la asesora presidencial Valerie Jarret.
Los críticos de las acciones ejecutivas de Obama argumentan que ninguna de las medidas podría haber evitado alguno de los incidentes violentos más recientes en Estados Unidos. Se anticipa que algunos grupos buscarán el bloqueo de estas iniciativas en los tribunales.
La procuradora Lynch sostuvo sin embargo que las acciones son consistentes con la segunda enmienda constitucional que permite el uso de armas a ciudadanos estadounidenses.