Berlín.- La coalición de gobierno que encabeza la canciller federal de Alemania, Ángela Merkel, dio hoy a conocer en Berlín el primer proyecto de ley que establece un marco para integrar a los inmigrantes en el país europeo.
Merkel dijo este jueves que el acuerdo entre los tres partidos de la coalición (Unión Demócrata Cristiana, Unión Social Cristiana y Partido Socialdemócrata) es un progreso cualitativo y que por primera vez en la historia de Alemania hay un proyecto de ley de integración.
Manifestó que la coalición está consciente de que está frente a una doble tarea: por una parte conducir los flujos migratorios, mientras que los inmigrantes asumen obligaciones para el país que los acoge.
Los inmigrantes tienen la obligación de registrarse ante las autoridades del país y al mismo tiempo esforzarse por integrarse.
La idea de fondo del proyecto de ley se resumió con los conceptos de “reclamar e impulsar”, ya que se plantea la exigencia (reclamar) de que los inmigrantes utilicen todas las facilidades que brinda el Estado alemán (impulsar) para que se integren, de forma que puedan formar parte de la sociedad y del mercado de trabajo.
Las facilidades son gratuitas para los inmigrantes, y van desde clases de alemán.
El argumento es que sin saber el idioma, no se lleva a cabo la integración. El gobierno alemán se propone evitar un mayor surgimiento de sociedades paralelas que terminan siendo focos de conflicto.
Esa oferta del Estado alemán la deberán de aceptar principalmente los inmigrantes que tienen posibilidades de quedarse por venir de países que Alemania reconozca que está en guerra, como Siria.
Lo contrario pasa con los que vienen de Afganistán, a quienes se regresa a las zonas “pacificadas” de su país.
El objetivo es integrar a la mayor cantidad de inmigrantes en el mercado de trabajo, en particular a los que reconozca el derecho de asilo.
Los alemanes no gozarán de la preferencia durante el otorgamiento de puestos de trabajo. Alemanes e inmigrantes estarán en condiciones de igualdad en ese contexto.
El proyecto de ley contempla también sanciones en el caso de que el inmigrante se niegue a vivir en la ciudad en la que las autoridades migratorias le asignan.
Habrá asimismo desventajas para los inmigrantes que se nieguen a estudiar el idioma o a trabajar.
Entre las sanciones se contempla reducir el financiamiento y otras ayudas que los asilados reciben del estado alemán.