Reikiavik.- El primer ministro de Islandia, Sigmundur Gunnlaugsson, renunció hoy a su cargo, tras el escándalo desatado por la publicación de los “Papeles de Panamá”, que han revelado que junto a su esposa tenía una empresa en un paraíso fiscal.
Según la televisión pública islandesa RÚV, la decisión fue adoptada en una reunión del Partido Progresista, que lidera Gunnlaugsson, y horas después de que solicitara la disolución del Parlamento al presidente del país, Ólafur Ragnar Grímsson.
Gunnlaugssonn seguirá al frente de su partido, que ha propuesto al hasta ahora ministro de Agricultura, Sigurour Ingi Johannsson, como nuevo primer ministro.
La dimisión se produce luego que más de 10 mil personas se manifestaron el lunes en el centro de Reikiavik para pedir la renuncia del primer ministro tras aparecer su nombre en las documentos de un bufete panameño de abogados filtrados a numerosos medios internacionales.
De manera paralela, las cuatro fuerzas de la oposición —socialdemócratas, Piratas, Izquierda Verde y Futuro Brillante— solicitaron formalmente un voto de censura contra el jefe del gobierno.
Los “Papeles de Panamá” muestran que Gunnlaugsson y su esposa, Sigurlaug Pálsdóttir, eran dueños de una empresa en el paraíso fiscal de las Islas Vírgenes Británicas llamada Wintris, cuya propiedad omitió declarar.
El primer ministro, quien entró en el Parlamento en 2009, ha insistido en que en ningún momento ni él ni su mujer hicieron uso de esa firma para evitar pagar impuestos en Islandia.
La investigación denominada “Papeles de Panamá”, basada en millones de documentos del bufete panameño Mossack Fonseca, reveló un entramado de lavado de dinero en el que participan también políticos, empresarios, deportistas, actores y figuras públicas de prestigio mundial.