Ciudad del Vaticano.- Meses atrás el Papa Francisco manifestó su deseo celebrar en grande a la Virgen de Guadalupe este año y así lo hizo. La Catedral de San Pedro iluminada de fiesta se vistió del color y de la nostalgia de la música latinoamericana a través de la Misa Criolla, de Ariel Ramirez, e interpretada con gran dramatismo por Patricia Sosa, dirigida por Facundo Ramírez y el coro de la Capilla Sixtina.
“La Santa Madre de Dios no sólo visitó a estos pueblos, sino que quiso quedarse con ellos… Por eso, nosotros, hoy aquí, podemos continuar alabando a Dios por las maravillas que la virgen ha obrado en la vida de los pueblos latinoamericanos”, observó el Pontífice.
Francisco dio la misa virtiendo gran solemidad en sus palabras y en el tono de su voz se podía sentir su gran emoción al oír los acordes de la Misa Criolla, una obra musical argentina que, se sabe, anhelaba profundamente fuera interpretada ese día en la Cetedral de San Pedro para honrar a la Virgen Morena.
“América Latina es el continente de la esperanza”, dijo Francisco, también “porque de ella se esperan nuevos modelos de desarrollo que conjuguen tradición cristiana y progreso civil, justicia y equidad con reconciliación, desarrollo científico y tecnológico con sabiduría humana, sufrimiento fecundo con alegría esperanzadora”, expresó Francisco.
Janet Murgía, presidenta de NCLR estuvo en la celebración
El evento que tomó casi un año de preparativos atrajó católicos de toda latinoamerica, especialmente de México, Argentina y Estados Unidos. Entre los invitados especiales se encontraba Janet Murgía, presidenta del Concilio Nacional de la Raza (NCLR), quien llena de emoción dijo que es una de las misas más bellas y conmovedoras que ha presenciado en su vida.
“Fue un encuentro con mis raíces, el estar en la Catedral de San Pedro, presenciando la misa en español por un papa latinoamericano me hizo recordar a toda mi familia; las tradiciones católicas que mis padres me enseñaron. Creo que la Virgen de Guadalupe es un símbolo cultural y religioso muy fuerte que nos ayuda a mantener unidos a los latinoamericanos por todo el mundo”, expresó la dirgente de la organización.
Murgía manifestó también su gran emoción por la visita que el Papa hará a Filadelfia el próximo año.
“Será un día muy especial para los católicos en Estados Unidos, estoy segura que su presencia ayudará a fomentar la unión entre los hispanos y le dará fuerza al catoliscmo en nuestro país”, apuntó Murgía.
Por su parte, Guzmán Carriquiry, vicepresidente de la Comisión Pontificia para Latinoamérica en la Santa Sede, encargada de la organización del evento, agradeció a todos los latinoamericanos que hicieron el esfuerzo por asistir a la celebración desde países lejanos y agregó estar muy contento por el resultado del evento.
“El Papa ha celebrado a la Virgen de Guadalupe en el Vaticano con gran dignidad y con todos los honores que la virgen mexicana se merece, y al mismo tiempo ha honrado a todos los pueblos latinoamericanos que la veneran con tanto amor. Esta fue una gran fiesta a la Virgen de Guadalupe de la que todos debemos estar orgullosos”, puntualizó con gran entusiasmo.