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Con el fin de ayudar a una comunidad poblana en desgracia por recientes inundaciones, Sherlyn y el político poblano Gerardo Islas, decidieron vender la exclusiva de su boda religiosa, efectuada en la capilla de la ex Hacienda de Chautla, en San Martín Texmelucan, Puebla.
“Jolalpan quedó muy afectado por la lluvias, se desbordó el río y la mayoría de sus habitantes perdieron todo, sus casas, sus camas, ropa, todo, es por ello que lo platicamos y quisimos que nuestra boda se convirtiera en una boda con causa, todo lo que paguen por esa exclusiva, se destinará ayudarlos”, indicó la actriz, quien se dio un momento para salir a platicar con los medios, a los que ellos mismos costearon el viaje.
A poco más de año de haber contraído matrimonio civil, en Cancún, Quintana Roo, (28 de septiembre de 2103) esta vez la pareja escogió la tierra del novio para el enlace religioso, al que asistieron más de 600 invitados del medio artístico y la política.
Pese a que Sherlyn podría seguir los pasos de Angélica Rivera, la jalisciense señaló que apoya al máximo a su marido, en quien ha encontrado al príncipe azul con el que todas las mujeres sueñan, pero no está pensando en que sea Presidente de la República, ni ella Primera Dama.
“Claro que lo apoyo en lo que haga, él tiene su proyecto (es presidente del Partido Nueva Alianza, en Puebla), y ahí estoy, junto a él, pero haría lo mismo si fuera entrenador de delfines, ahí estaría pasándole las sardinas, y lo mismo si fuera carpintero, estaría con él viendo cómo lija la madera, lo cierto es que ahorita no está pensando en ser Presidente”.
Actriz desde muy niña, no piensa en dejar su carrera, que hasta ahora ha sido muy exitosa, porque cuenta con el apoyo total y absoluto de Gerardo, quien le da plena libertad de hacer lo que ella quiera, aunque sí desea darse un tiempo para formar una familia, y aunque en esta charla aseguró no estar embarazada, hace unos meses señaló que ya deseaba ser mamá “quiero que sea pronto”.
“No estoy embarazada, como se ha dicho por ahí, ni tampoco vamos a decir que es la sorpresa de la noche, sí queremos tener hijos, pero esas cosas las decide Dios”, enfatizó.
Para su boda religiosa, Sherlyn lució tres vestidos, uno para la ceremonia, otro para salir a su charla con la prensa, y uno más para la fiesta.
El año pasado la Luna de Miel fue en Indonesia, esta vez esperaremos la edición de la revista a la que vendió en exclusiva los datos, para saberlo.