Experto en la producción de melodramas, Juan Osorio considera que las series, pese a su auge en distintas plataformas, no desbancarán a las telenovelas en el gusto del público, ya que son géneros distintos.
“¡Hay unas series muy buenas!, pero no son competencia con las telenovelas; en serio, este género va a prevalecer, porque son como el amor, la fantasía, la aspiración”, señala el productor a través de un largo escrito respecto a sus sentir de la supuesta crisis por la que están pasando los melodramas tradicionales.
Seguidor de algunas series, señala que cada género tiene su momento y este es el de ellas, pero las telenovelas tienen más de medio siglo de ser las favoritas del público.
“¿Qué pasa con las series?… que se atreven a hacer cosas que no son cotidianas y ahí están, pero son como las películas, hay clásicos, épocas doradas, pero son ciclos. Aquí hicimos series hace mucho; yo hice en 1982, la vida de María Conesa en serie, salíamos todos los domingos con Ofelia Medina… Creo que es de ciclos, mientras que las telenovelas tienen más de 50 años, y siguen”.
Preparado ante las nuevas exigencias de la audiencia
Con más de 30 años de experiencia como productor de telenovelas, Juan no deja de lado que la audiencia de las telenovelas ha cambiado drásticamente en los últimos años, debido al desarrollo de las plataformas digitales, y a la pasión desbordada que los jóvenes tienen por ellas.
“Yo estoy consciente de la transformación que están teniendo los medios de comunicación, sobre todo en este momento que coinciden todas las ventanas de exhibición que hay, todo el cambio de analógico a digital y, admito, nos agarró desprevenidos, y sobre todo, todas las redes sociales que se han venido. Todo esto a la televisión abierta le propicia una carencia de audiencia, porque todo mundo está tratando de ubicarse y la oferta es muy amplia”.
Sin embargo, la respuesta de Juan ante estos cambios es buscar, estudiar, proponer historias inéditas, bien estructuradas, como “Sueño de Amor” para seducir y convencer a esta audiencia que se ha ido de la televisión abierta.
“No hay otra manera más, que subiéndote al peldaño en el que ellos se encuentran, haciendo propuestas de historias originales y haciendo una combinación de los repartos, con actores que te dan un respaldo un nombre al lado de jóvenes con impacto en la sociedad juvenil, para poder seducirlos”.
No hay crisis de la televisión abierta
Para Juan, la televisión abierta ,en sí, tampoco está en crisis, está en una etapa de transición, de la que seguramente saldrá adelante
“La tevé está regresando a la época cuando la radio fue desplazada por la televisión, es lo que nos está pasando. No había mucha gente que creyera en la tevé, seguían con el hábito del radio. Hoy la gente no se acostumbra al cambio de analógico a digital, y aunque nosotros hacemos “Sueño de Amor” en 4k, en los hogares aún no se aprecia, pero nosotros tenemos que hacerlo, porque o lo intentamos o nos quedamos atrás, hay que intentarlo y abrir esa brecha, yo creo que en unos dos años, estaremos hablando de números reales, de audiencia real y demás competencias, porque cada día salen más propuestas en esta carrera”.
Busca prevalezcan los valores en los melodramas
Específicamente, ante la competencia de las nuevas plataformas de comunicación, Juan lejos de sentirse agobiado, le encantan, lo seducen, ve en ellas una oportunidad de crecer ahí, de producir cosas acorde a los nuevos tiempos, sin olvidar que hay que preservar los valores universales.
“Hay un lenguaje, una forma de comunicación diferente, pero predomina lo que siempre va a existir: el amor, la maldad, la envidia, elementos que siempre han existido, creo que en este caso de “Sueño de Amor”, es el sueño que tenemos todos de lograr la atención de la audiencia, sobre todo en un horario familiar que le permita a la mamá dejar, sin ningún riesgo, que su hijo vea esta telenovela, estamos poniendo un poco de thriller para darle interés a nuestro contenido”.
Juan refiere que la televisión a la que estábamos acostumbrados hace 20 años fomentaba valores, como el de la familia, pero en este 2016, la familia es una unidad disgregada, por eso, con un nuevo lenguaje, las historias de amor se deben seguir contando.
“Tener una familia separada no quiere decir que te olvides de los valores, esa herencia está con los hijos, como papá o mamá eres responsable de inculcarles valores a tus hijos. El amor por uno mismo, es un valor, el amor por los hijos, el amor por la familia, y el amor de pareja, el amor carnal porque, nada te encantaría más que compartir tu proyecto de vida con una pareja que se acople, y yo necesito esa motivación, eso tiene que existir y no hay edad para eso, parejas de personas mayores y ves ese amor y ese cariño. De ese amor, de todos los amores, hablamos en “Sueño de Amor”, que insisto, es original, porque también quiero hacer mi aportación al género”.
Plenamente confiado en la continuidad melodramas
Siempre entregado a su trabajo, Juan busca conservar el melodrama en el gusto del público de hoy.
“Para mí, Televisa es la fábrica de sueños más importante de Latinoamérica, pero eso implica también ser creador de contenidos originales; yo no estoy en contra del remakes, creo que son válidos, pero es importante seguir creando contenidos nuevos y ese es el compromiso de esta empresa y tenemos que mantener ese mercado internacional a través de contenidos muy importantes”.
Indica que su gran ventaja como productor, es es que ya no trabaja por el dinero o por el reconocimiento “trabajo por pasión, porque creo en el género de la telenovela y porque creo que puedo aportar algo a la audiencia… aunque no me enojaría que me pagaran más”, dice finalmente el productor.