Nueva York.- Los managers, coaches y catchers de cada equipo podrán realizar sólo tres visitas al montículo durante un partido de béisbol, excepto para cambiar de lanzador, en un experimento con la intención de acelerar el juego que se implementará en la Liga de Otoño de Arizona.
El comité que supervisa la velocidad de los partidos, creado el mes pasado por el comisionado de Grandes Ligas Bud Selig, anunció varias medidas el miércoles que serán probadas en la liga de Arizona, que comienza el 7 de octubre y termina el 15 de noviembre. El límite de tres visitas al montículo aplicará incluso si el partido llega a entradas extras.
Los partidos de Grandes Ligas esta temporada duraron en promedio 3 horas, 2 minutos, un aumento de las 2:33 horas que duraban en 1981.
En otros cambios que serán probados, no será necesario realizar lanzamientos cuando haya un boleto intencional, y los bateadores tendrán que mantener al menos un pie en la caja de bateo en cada turno, a menos que haya un batazo de foul, un lanzamiento descontrolado o un pasbol, o si un lanzamiento lo obliga a salir de la caja o el umpire otorga tiempo muerto.
En los partidos en Salt River Fields, habrá un reloj en cada dugout, detrás del plato y en los jardines con una cuenta de 20 segundos, para evitar que los lanzadores demoren demasiado. Si un bateador se sale de la caja durante ese período de 20 segundos, que termina cuando el pitcher empieza su movimiento para lanzar, el serpentinero puede realizar el envío. El umpire puede cantar un strike si no otorgó tiempo.
El reloj comenzará a contar cuando el pitcher tenga la pelota o, después de un foul, cuando el umpire indique el reinicio del juego.
Normalmente, la regla 8.04 del béisbol dice que un pitcher debe lanzar en un máximo de 12 segundos tras recibir la pelota cuando las bases están vacías, y los umpires pueden cantar una bola por una violación. Pero esa regla casi nunca es implementada.