París.- La comisión ética de la FIFA solicitó la suspensión de por vida del presidente de UEFA Michael Platini, según el abogado del ex futbolista.
La medida podría echar por tierra las ambiciones del francés de reemplazar a Joseph Blatter al frente de la FIFA.
Al abogado Thibaut d’Ales le dijo a The Associated Press que se pedirá el castigo máximo cuando la unidad de investigación de la comisión presente su informe final en diciembre, en que Platini deberá defenderse ante el juez de ética de la FIFA Joachim Eckert.
“El alcance de la solicitud nos convence de la total falta de credibilidad de esta comisión”, sostuvo D’Ales en una entrevista telefónica. “No hay un solo elemento tangible en este caso que confirme las sospechas” de irregularidades.
Actualmente Platini cumple una suspensión provisional de 90 días en relación con un pago de 2 millones de dólares de fondos de la FIFA que recibió en el 2011 por servicios prestados entre 1998 y 2002. Los pagos fueron autorizados por Blatter, quien también fue suspendido por 90 días y espera un juicio.
Platini niega las acusaciones y argumenta que el dinero lo recibió bajo un contrato verbal con Blatter.
“Obviamente tenemos pruebas de que había un arreglo de este tipo”, afirmó D’Ales. “Las presentaremos ante el Tribunal de Arbitraje del Deporte, que tomará el caso a corto plazo”.
Se estima que Eckert entregará su decisión sobre los casos de Platini y Blatter en diciembre. Cualquier sanción podría ser apelada ante el comité de apelaciones de la FIFA y el Tribunal de Arbitraje del Deporte.
D’Ales dijo que se enteró de la solicitud el lunes y decidió divulgarla públicamente al ver que la información se había filtrado a la prensa. Expresó que el objetivo de la FIFA es demostrar que no hubo contrato entre Platini y Blatter.
Un portavoz de la comisión de ética de la FIFA se negó a confirmar qué sanción fue solicitada la semana pasada. El vocero Andreas Bantel dijo a la AP que obraban así para proteger la “presunción de inocencia” del imputado.
Platini aspira a limpiar su nombre y postularse a la presidencia de la FIFA en las elecciones del 26 de febrero en que se elegirá el sucesor de Blatter, quien renunció en medio de denuncias de corrupción en el seno del organismo rector del fútbol mundial, el cual está siendo investigado por la justicia de Estados Unidos y de Suiza.