Clearwater — Ryan Howard ha escuchado los consejos de comentaristas y fanáticos, de que pruebe con toques o empuje la pelota por el jardín izquierdo cuando la defensa rival se inclina hacia su banda.
Sus jonrones le permitieron convertirse en una de las principales figuras de las Grandes Ligas, un acaudalado campeón de la Serie Mundial con los Filis de Filis de Filadelfia, y no se propone cambiar su estilo de bateo solo porque tres infielders se muevan al lado derecho del cuadro para llevarse rodados que antes se internaban a los jardines o líneas cortas que caían para hits.
“Cuando uno es un espectador, es muy fácil opinar”, explicó Howard durante un juego de pretemporada. “Pero es mucho más difícil”.
Howard, David Ortiz de Boston y Chris Davis de Baltimore fueron los bateadores que más enfrentaron formaciones defensivas especiales el año pasado, con el cuadro interior volcado hacia un costado en 400 o más apariciones el plato, según Baseball Info Solutions.
Sus porcentajes de bateo contra las formaciones son mediocres: con los infielders cargados a la derecha, Ortiz bateó para .201 el año pasado, Howard .167 y Davis .121.
Pero muchos de estos bateadores, primordialmente zurdos, se resisten a reaccionar ante lo que es una consecuencia de una era de estudios estadísticos. Insisten en que la solución es batear más a lo profundo.
“Batear más jonrones, batear más dobles y recibir más bases por bolas”. Esa fue la solución proporcionada por Mark Teixeira de los Yanquis de Nueva York.
Los rodados de hit de Howard al derecho declinaron de 15 en 2010 a siete el año pasado, según STATS.
“Tienes que limitarte a lo que sabes hacer. No se puede controlar”, dijo. “Es la misma cosa cuando bateas una línea y alguien se zambulle para atrapar la pelota”.
Howard no ha logrado embasarse con un toque de sencillo en toda su carrera en las mayores. Ortiz tiene seis, incluyendo dos en las últimas cinco campañas.
Albert Pujols, el bateador derecho que más enfrenta formaciones especiales, apenas cuenta con un par de sencillos mediante toques en las mayores y ninguno desde 2004.
“No voy a cambiar mi forma de batear porque muevan toda la defensa hacia mi banda”, dijo. “Así es como funciona esto”.
Brian McCann, quinto bateador en la lista de los que más formaciones especiales enfrentaron el año pasado, logró empalmar 15 rodados al derecho para sencillo en 2010 y 16 en la siguiente temporada, pero apenas pudo dar tres el año pasado.
“Soy consciente que eso le resta puntos a mi promedio de bateo”, dijo McCann sobre las defensas especiales. “Por ahora, hay que lidiar con ello. Es parte de los juegos y cómo los jugadores debemos hacer un mejor trabajo usando todo el terreno”.
Tony La Russa, el mánager que el año pasado fue elevado al Salón de la Fama, comprende que los bateadores de poder se resisten más a un cambio de mentalidad y estilo. Al mismo tiempo, pronostica que algunos acabaran rindiéndose y que eso obligará a los equipos a reconsiderar el uso de las formaciones en cierta situación.
“Alguien saldrá a decirte que si puedes obligarles a alterarle como batean, pues pudiste conseguir algo, y quizás sea así”, comentó. “Pero en un juego en que la diferencia es de una carrera, si te ganan con un hit a la banda contraria y pierdes, entonces quién es el perdedor. En este deporte, no hay nada que sea abrumador. Los bateadores se adaptarán y lo harán para las formaciones”.