Roma.- Un personaje que a nadie deja indiferente, capaz de colocarse al centro de la escena y obligar a los grandes líderes mundiales a tomar posición, es el perfil del Papa Francisco que emerge de “La reforma en marcha”, libro apenas presentado en Roma.
Obra del vaticanista y corresponsal de la agencia Notimex, Andrés Beltramo Alvarez, devela los entresijos de la sorpresiva elección papal de Jorge Mario Bergoglio en marzo de 2013 y ofrece una pormenorizada crónica de sus primeros dos años de pontificado.
El texto, publicado en España por la casa editorial “Stella Maris”, fue presentado en la sede del Instituto Cervantes de la capital italiana, en la céntrica Piazza Navona, ante la presencia de representantes diplomáticos, funcionarios de la Santa Sede, periodistas e intelectuales.
“La gran incógnita es saber hasta dónde él quiere ir con esta reforma que ha emprendido (del Vaticano y de la Iglesia)”, dijo sobre la voluntad del Papa, el periodista español Antonio Pelayo, corresponsal del canal televisivo Antena 3.
“Sólo él lo sabe, quizás sus dos o tres colaboradores más cercanos, pero nadie más. Lo cierto es que Francisco sabe muy bien hacia donde quiere llevar a la Iglesia, sabe de las dificultades y de las insidias que lo rodean”, agregó.
El fue uno de los tres periodistas que, junto a Beltramo, participaron en la presentación que contó con el patrocinio de la embajada de México ante la Santa Sede. Los otros dos expositores fueron Juan Vicente Boo y Darío Menor, corresponsales de los diarios ABC y La Razón respectivamente.
Valor periodístico
“A mi juicio el libro es una herramienta estupenda, tanto para quien está siguiendo día a día a Francisco como para quien no lo haga, por lo accesible de su lenguaje de crónica periodística, su gran valor son las fuentes directas, la opinión de los protagonistas”, señaló Menor.
De hecho, el texto fue construido sobre la base de más de 100 entrevistas, encuentros personales y conversaciones sostenidas por el autor con cardenales, obispos, sacerdotes, viejos amigos y nuevos colaboradores del pontífice argentino.
“Yo veía a Benedicto XVI como el Papa profesor, pero después me di cuenta que Francisco también lo era, pero él dio clases siempre en escuelas secundarias, donde estuvo obligado a captar la atención de los estudiantes”, indicó, por su parte, Boo.
“De ahí viene la capacidad de Bergoglio de hacerse entender por un público más amplio y de comunicarse de manera tan cercana con la gente”, añadió.
Los cuatro expositores coincidieron en subrayar el gran consenso internacional que ha obtenido la figura de Francisco y su voluntad de conducir a los católicos a un tiempo cuya característica fundamental sea la misericordia.
Entre los asistentes a la presentación destacaron el embajador mexicano ante la Santa Sede, Mariano Palacios Alcocer; el director en Roma del Instituto Cervantes, Sergio Rodríguez y el secretario de la Pontificia Comisión para América Latina del Vaticano, Guzmán Carriquiry.
Además se notó una nutrida presencia de diplomáticos, los embajadores de España, Guatemala, El Salvador, Argentina, Croacia, Portugal, Panamá, Venezuela, Uruguay y Honduras. La sala quedó pequeña para contener los más de 80 asistentes.