Ciudad del Vaticano.- El Papa Francisco instó hoy a realizar un “esfuerzo común” que involucre no sólo a naciones sino también a las comunidades religiosas involucradas, para superar el conflicto que azota al Medio Oriente.
Este tema estuvo al centro de una audiencia privada que sostuvieron el pontífice y el presidente de la República de Armenia, Serzh Sargysan, en el Palacio Apostólico del Vaticano.
Según informó la sala de prensa de la Santa Sede, Jorge Mario Bergoglio expresó su confianza en que se logre una convivencia pacífica de los pueblos de toda la región.
“Una atención especial se ha dedicado a la situación de las comunidades cristianas y de otras minorías religiosas de la zona y a la crisis humanitaria que concierne a los prófugos procedentes de las regiones afectadas”, indicó.
Aunque no mencionó específicamente a Turquía, la nota vaticana se refirió al conflicto aún no solucionado entre armenios y turcos, caracterizado por un siglo de persecuciones, masacres y división.
“Con respecto a la situación política regional se ha manifestado el deseo de que se superen las complejas cuestiones irresueltas a través del diálogo entre todas las partes interesadas”, estableció el Vaticano.
Tras el encuentro con el Papa, “desarrollado en una atmósfera cordial”, Serzh Sargysan se reunió, también en privado, con el “número dos” del Vaticano, el secretario de Estado Pietro Parolin, y el arzobispo Dominique Mamberti, secretario para las Relaciones con los Estados de la Santa Sede.