Roma.- La mitad de los 65 millones de refugiados registrados en el mundo en 2015 son niños, advirtió hoy el delegado del Alto Comisionado de las Naciones Unidas (ACNUR) para el sur de Europa, Stephane Jacquemet.
Al participar en Florencia en un acto por la Jornada Mundial del Refugiado, dijo que “en 2015 las personas obligadas a escapar de sus países fueron 65 millones, contra los 59 millones de 2014”.
Al abrir los trabajos de un simposio sobre el tema en el palacio Strozzi Sacrati florentino, apuntó que tales números significan que actualmente una de cada 113 personas en el planeta se ha visto obligada a escapar de su país.
“En los últimos cinco años ha habido un incremento exponencial del número de refugiados a causa de las crisis que duran más, como las de Somalia o Afganistán, iniciadas hace 30 y 40 años, y por su mayor frecuencia”, anotó.
Reconoció que el año pasado Europa se enfrentó al problema de acoger a más de un millón de refugiados, pero subrayó que la mayor parte de ellos no se encuentran en el Viejo Continente.
“El 86 por ciento de ellos (los refugiados) se ha establecido en países de mediano y bajo ingreso vecinos a las naciones en situación de conflicto”, señaló.
En ese sentido, destacó que Turquía, con tres millones de refugiados, es el principal país afectado del mundo, mientras Libano, con 183 refugiados cada mil habitantes, tiene el más alto número en relación a su población.
Jaquemet agradeció a Italia por su esfuerzo en las operaciones de socorro de inmigrantes en el Mediterráneo, pero resaltó que ese mar se ha convertido en la ruta más letal, con unos tres mil muertos en lo que va de 2016.
Recordó que actualmente Italia hospeda a más de 115 mil refugiados, un número cinco veces superior al de 2013.
En tanto, en un mensaje en ocasión de la Jornada Mundial del Refugiado, el presidente italiano, Sergio Mattarella dijo que “los refugiados enriquecen a nuestro país”.
“La tasa demográfica italiana es muy baja, por lo que la llegada de jóvenes con talento y capacidad si es bien manejada enriquece a nuestro país”, subrayó.
El mandatario visitó la sede en Roma del Centro Astalli para los refugiados, que opera en 35 países.