La Habana, Cuba.- Un grupo de 42 médicos y enfermeras cubanos, que se convirtió en una referencia de vanguardia en la lucha contra el ébola en Sierra Leona, anunció ayer su retorno a Cuba al cabo de una misión humanitaria que inició en octubre de 2014.
“Hoy (domingo) en la mañana, oficialmente, terminamos la misión una parte de la Brigada Médica Cubana Henry Reeve, en Port Loko, Sierra Leona”, dijo a través de Facebook el integrante de la misión Pichi Vigil Fonseca, uno de los médicos cubanos que prestó ayuda.
“Partimos este domingo de regreso a la Patria, que nos espera, y al encuentro con nuestros familiares”, añadió en su muro, tras patentar su agradecimiento “de manera inmensa” por las tantas y tantas preocupaciones de tantos amig@s (nautas) que llevaré siempre conmigo”.
Vigil Fonseca dijo: “no me despido de África ni de ustedes, la deuda que aun persiste con el mundo se mantiene en pie”.
El día 2 de octubre de 2014, la Brigada Médica Cuba Henry Reeve llegó a Sierra Leona en respuesta a la solicitud del titular de la Naciones Unidas, Ban Ki Moon, y la directora general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Margaret Chan.
La misión enviada por el gobierno de Cuba acudió para enfrentar la epidemia de ébola que estaba en su apogeo en varios países de África Occidental.
El grupo de trabajo llegó al distrito de Port Loko, procedentes de Freetown, el 1 de diciembre de 2014 y estaba integrado por 17 médicos y 25 licenciados en enfermería.
El trabajo del grupo redujo los indicadores de la enfermedad, cuya tasa letal disminuyó a menos de la mitad que presentaba en sus inicios el Centro de Tratamiento de Ébola de Maforki, convirtiéndose en una institución de referencia en el distrito.
Por los casos atendidos y su complejidad, Port Loko se convirtió en uno de los principales campos de batalla contra la epidemia en África Occidental y en Sierra Leona y los miembros de la Brigada Médica Cubana Henry Revés “en uno de sus destacamentos de vanguardia”, dijo.