Para Carmen Salinas, la entrega y la disciplina son la clave para cumplir como actriz y diputada. Foto: Cortesia de Televisa
Con proyectos en marcha en cine, en una serie, y en el inicio de las grabaciones de la telenovela “Sueño de Amor”, donde dará vida a una abuelita que siempre anda en moto, Carmen Salinas señala que hasta el momento, la entrega y la disciplina que tiene para realizar su trabajo como actriz y diputada, le dan más energía y la hacen incansable “ya descansaré cuando me muera”.
“Tengo 62 años de carrera, y además ahora mi responsabilidad como diputada, pero sé que hay que levantarse y empezar el día a las cinco de la mañana para que rinda el tiempo”.
Entregada por completo al trabajo, asegura que en ella no existe el “no puedo”.
“Creo que el trabajo dignifica, hay que hacer todo con mucha disciplina, nunca hay que decir que no se puede, sino ponerle todas las ganas en lo que uno hace y hacerlo con mucho amor. Hay que darse tiempo para todo y hacerlo bien, porque yo así como estudio mis libretos, también estudio todo el trabajo parlamentario y estoy al tiro de todo.”, dice la actriz.
Carmelita agrega que dedica todo su trabajo y esfuerzo a quienes le ayudaron a construir su carrera, pero que desafortunadamente ya no están con ella.
“A todos los llevo en mi corazón y les dedico lo que hago. Todos los días me levanto a dar el máximo. Aunque los extraño mucho, trabajar aminora mi dolor”.
Si descansara, advierte con cierta nostalgia, “se me vendría esa angustia de la ausencia, de no ver a mis seres queridos, de no ver a Pedrito, al Chato, a mis hermanas, hace apenas un año se murió una de ellas, mucha gente se refugia en el vino, en el cigarro, qué bueno que lo hagan y yo trabajo mucho, hasta agotarme, así pienso que podré dormir bien en la noche…”
Un abuelita alivianada
En “Sueño de Amor” interpretará a Margarita, una abuelita a la que le gusta andar en moto “seré una vieja bien alivianada, como soy yo en la vida real con mis nietas y mi nieto, con quienes me llevo de maravilla. Voy a ser una abuela bien aventurera”.
Sobre cómo encuentra la motivación para emprender este nuevo reto actoral con tanto entusiasmo, comenta que tras más de 116 películas y unas 20 ó 25 telenovelas, le da mucho gusto que la sigan llamando.
“Con Juan (Osorio) me da más gusto porque lo quiero mucho, lo conozco desde que jalaba cables y sé que cuida mucho su trabajo, con mucho cariño; para mí es un amor que me considere como su madre y su amuleto de buena suerte”.
Además, dice, la contagia el entusiasmo que él imprime “y si me dice vas en moto, me subo a la moto; te pones pantalón, me lo pongo, no soy mucho de eso, pero me encanta todo lo que hace Juan y que tenga mucha fe en mí, como actriz, como amiga y como ‘madre’”, asegura la famosa empresaria y productora teatral.