Fotografía de la telenovela “Entre el amor y el Deseo”. Foto: Mixed Voces
Además de actriz y cantante, Lorena Rojas era una mujer positiva, bella, madura, y aunque de aspecto frágil, era un verdadero tanque de guerra, que luchó hasta su último aliento contra el cáncer.
Un día de 2010, a su regreso a México para volver a protagonizar en Azteca una novela, nos platicó muy serena lo que el cáncer había significado en su vida, nos contó que lo primero que hizo cuando le dieron la noticia, en octubre de 2008, fue tomar su guitarra, pensar positivo e iniciar entonces una lucha por su vida “estoy convencida de que el cáncer no te quita la vida, lo que te quita la vida es el miedo”, puntualizó.
A los 36 años, había descubierto el cáncer en su cuerpo gracias a una mamografía de rutina, tan guerrera era que no dudó en someterse a una mastectomía del seno derecho, y luego a duro tratamiento de quimioterapia.
Usaba una prótesis y era tan positiva que señalaba que se veía aún mejor que antes de la operación.
Lorena inició su carrera como modelo, mientras estudiaba actuación en el Centro de Educación Artística de Televisa, donde en 1989 debuta en la telenovela Alcanzar una Estrella y Alcanzar una Estrella II, luego hizo Buscando el Paraíso, Bajo un Mismo Rostro, Canción de Amor y en 1998 El Alma no Tiene Color, lo que sería su último trabajo en Televisa.
Ese mismo año llegó como exclusiva a TV Azteca, donde protagoniza la telenovela Tentaciones, al lado de José Angel Llamas, con gran éxito, lo que le ganó el inicio de una carrera sólida en la televisora donde sumó protagónicos en Azul Tequila, El Candidato y Como en el Cine en 2001 que le abriría las puertas en el mercado internacional. Sería hasta el 2010 que regresó a Azyeca a grabar Entre el Amor y el Deseo.
En Telemundo, igualmente alcanzó grandes proyectos como Ladrón de Corazones, El Cuerpo del Deseo, Pecados Ajenos, Rosario y estaba preparándose para hacer Amor Desconocido.
Nacida en la Ciudad de México en 1971, Lorena Rojas comenzó su carrera en la década de 1990 con la primera y la segunda parte de la telenovela Alcanzar Una Estrella. Foto: Agencia Reforma
Regreso a Televisa
En noviembre de 2014 había regresado a Televisa, luego de 15 años de ausencia y se sintió emocionada de realizar pruebas para un papel en la telenovela Amores con Trampa, de Emilio Larrosa, sabía ya que el cáncer había regresado a su cuerpo, a su vida, pero era una mujer muy positiva que no se dejaba vencer e hizo el casting con muchas ganas de quedarse. Finalmente no pudo y regresó a Miami, donde desafortunadamente este 16 de febrero falleció.
Apenas en 2014, meses antes de que le informaran que el cáncer había vuelto a su cuerpo, ahora en forma más agresiva y que estaba afectando sus huesos y su hígado, había logrado ser madre, gracias a la adopción. Pequeña de apenas un año, que ahora se queda al cuidado de la pareja de la actriz.
En aquella plática donde Lorena nos habló de su cáncer, señalaba que luchar contra esta enfermedad, le había dejado muchas enseñanzas, entre ellas, darse cuenta que faltaban apoyos para el enfermo, nos confesó que Telemundo le había reducido al 50 por ciento su contrato “quizá pensando en que como tenía cáncer valía menos mi trabajo, y eso no se puede aceptar”. Ya no quiso seguir con la televisora, y con sus ahorros, se enfocó a tomar, de la forma más tranquila, sus quimioterapias, y al terminarlas, enseguida se avocó a buscar trabajo y rápidamente lo encontró debido a su calidad histriónica, fue precisamente cuando regresó a Azteca y alzó la voz para que no se hiciera a un lado a las personas que padecían, o habían padecido cáncer.
“El cáncer no es lo mejor que me ha pasado, pero gracias a éste ahora soy la mujer que yo quiero ser. Ahora reconozco mis valores internos, reorganicé mis prioridades, me siento más plena, madura y siento que ahora estoy empezando a vivir”, decía.
“El cáncer no te quita la vida, lo que te quita la vida es el miedo”, señaló Lorean respecto a su enfermedad. Foto: Mixed Voces
Lorena, quien hizo 17 telenovelas en su carrera, e iba por muchas más, siempre tenía a su lado a la música, que para ella, lejos de ser hobby, era fundamental en su vida “la música siempre ha sido un gran aliado para mi, siempre que algo me golpea, la música me reconforta, me levanta a tocar la guitarra, a escribir, es algo que no voy a dejar nunca”.
Estaba segura de haber vencido a la enfermedad y tenía muchas ganas de ser un aliento de esperanza, para decirle a todas las mujeres que es posible superar el cáncer de mama.
“Siempre que me abran un micrófono, lo usaré para decirles a las mujeres que es posible vencer esta enfermedad, eso es para mi una responsabilidad, aunque haya por ahí quien dijo que me hacía publicidad con mi enfermedad. El cáncer no es una sentencia de muerte. Soy amiga, soy mujer y me quedé en este mundo para ayudar y apoyar a quienes lo necesiten”, señalaba.
A Lorena se le recuerda también por su paso en teatro con obras como Simplemente Susana, Una Pareja con Ángel, Vaselina, Don Juan Tenorio-Cómico y Todas las Hijas de su Madre.
La actriz trabajó también en cine, en películas como Más que Alcanzar una Estrella, Me tengo que casar, El triste juego del amor, Quebradita Morena y Corazones Rotos.
Uno de sus mayores orgullos era que por esta lucha contra el cáncer, había sido nombrada en julio de 2009 representante hispana de la fundación Livestrong, creada por Lance Armstrong.
Descanse en Paz.