México.- Convencido de que tuvo al mejor maestro para hacer televisión, Roberto Gómez Fernández consideró que el mayor legado de su padre, Roberto Gómez Bolaños, es hacer las cosas con el corazón y como uno crea, dándole el respeto que se merece el público y este trabajo.
En entrevista con Notimex, detalló que de “Chespirito”, cuyo aniversario luctuoso se conmemora este sábado, aprendió entre otras cosas a tener la convicción de hacer las cosas sin claudicar, independientemente si las fuerzas jalan a otro lado.
“Él siempre trató de hacer lo mismo, el mejor contenido posible, pero no para otros sino uno que él disfrutará. Nunca le hizo caso a ningún estudio o investigación de campo para ver qué sucedía”, expuso Gómez Fernández.
El productor expuso también que aunque el proceso creativo de su padre era aparentemente simple, en realidad era muy complejo. “Cuando releo cosas que hizo, digo es muy complejo. Sus libretos dan cuenta de que era un genio”, anotó.
A propósito del primer aniversario luctuoso de su padre, explicó que desde que él ya no está aquí a descubierto varias cuestiones, “porque pese a estar tan cercano a él, el estar revisando su obra, me sigue sorprendiendo cada palabra y pensamiento”.
Refirió que el efecto de lo que consiguió con su público es también sorprendente y “creo que se fue satisfecho porque él decía que no sabía qué había hecho por la dimensión que consiguió, y es que él jamás pensó ni planeó tener la trascendencia que tenía, tiene y seguirá teniendo”.
Gómez Fernández aseguró que la premisa de su padre al generar contenido era hacer entretenimiento sano y familiar a través de valores universales para que a todo el mundo de habla hispana le llegara bien el mensaje, pero sólo eso, sin el afán de trascender cómo lo hizo, toda vez que esta trascendencia se dio de manera natural.
“Para mí es un honor y satisfacción el cariño que le tienen a mí padre, pero también es una responsabilidad porque es un peso muy grande el poder darle seguimiento a su trayectoria”, comentó.
Respecto a la conmemoración de su muerte, refirió que dado que a su padre, aunque parezca paradójico, no le gustaban los tumultos, “la familia, los hijos, los nietos y sobrinos, así como algunos primos, hemos decidido estar nosotros en familia, como a él le hubiera gustado.
“Vamos a estar en la casa de una de mis hermanas recordándolo. A mi padre no le gustaban los tumultos, es paradójico porque le gustaban las cosas pequeñas, no le gustaba ser el centro de atención de ningún evento. De hecho cada que había un intento de homenaje nos decía por favor ya no quiero más homenajes”, recordó.
El actor, comediante y productor de televisión mexicano Roberto Gómez Bolaños, murió el 28 de noviembre de 2014 a los 85 años de edad en Cancún, Quintana Roo, por una insuficiencia cardíaca.