Phoenix.- Tras sus primeros 29 juegos como ligamayorista y viniendo de menos a más tanto a la ofensiva como en la antesala, el cubano Yasmany Tomás ya comienza a sentirse en sus aguas por los Diamondbacks de Arizona.
“Cada vez me siento más seguro, más tranquilo aquí, estamos viendo los resultados del trabajo duro. Seguiremos trabajando así para seguir mejorando”, dijo Tomás el viernes durante una conferencia de prensa para los medios en español en el Chase Field.
Tomás, quien firmó un pacto de seis años y US$68.5 millones con los Diamondbacks en diciembre, tuvo unos entrenamientos primaverales de muchos altibajos, sobre todo en la tercera base, posición en la que estaba tratando de hacer el equipo y que anteriormente sólo había jugado esporádicamente en su natal Cuba.
Pero tras empezar la campaña regular en Triple-A Reno, el oriundo de La Habana nunca bajó la cabeza y siguió trabajando duro y tras una lesión del antesalista Jake Lamb a mediados de abril fue subido al equipo grande después de apenas cinco juegos y 23 veces al plato en liga menor.
“La pretemporada fue un poco difícil para mí, hacía mucho tiempo que no jugaba un partido oficial. Pero ya en ligas menores fue mucho más fácil, de los partidos que tuve ahí puse todo mi empeño y luego se dio el llamado”.
Desde que fue ascendido, Tomás ha mejorado su promedio de .276 a .337 desde el 11 de mayo y se ha visto mucho más seguro en la tercera base, incluso luciéndose en algunas jugadas.
Ese repunte en su juego le ha valido a Tomás ser tomado en cuenta como un candidato legítimo al Novato del Año por la Liga Nacional.
¿Realmente es algo que pasa por su cabeza?
“Bueno sí, tú sabes, al ser novato tengo mis metas y esa es una de ellas”, dijo el toletero de 24 años de edad. “Creo que el trabajo duro día a día va a hacer que se esto se pueda lograr”.
Entre la excelente camada de novatos que han debutado esta temporada por la Liga Nacional, Tomás ocupa los primeros lugares en varias categorías ofensivas. Sus números de poder y carreras producidas aún no cumplen con las expectativas – apenas conectó su primer cuadrangular la semana pasada en Filadelfia – pero el promedio de bateo y su defensa han llamado la atención.
“Sin duda el muchacho está creciendo, su confianza está creciendo”, dijo el manager Chip Hale. “Está teniendo éxito, las cosas se están dando para él y ahora siente que es el jugador que realmente debe ser”.