Querétaro.- El mediocampista de contención nacido en Hermosillo, Sonora, Jesús Molina afirmó que está sorprendido por lograr el título del Torneo Clausura 2015 de la Liga MX con Santos Laguna, pues era algo que en realidad no esperaba tan pronto.
En lo que fue apenas su primera campaña con el equipo de la Comarca Lagunera, Molina resaltó que siempre existió el deseo de ganar, pero no pensó que todo sucediera en seis meses, con un equipo que hizo reestructuración en el plantel.
“Uno siempre tiene la ilusión de competir, de pelear, de estar siempre en la liguilla, fue un torneo de bastantes altibajos, sabíamos que podíamos meternos a la liguilla, pero no esperaba yo ser campeón, esa es la realidad”, señaló en sonorense.
Indicó que Santos tomó demasiado confianza una vez metido en la “fiesta grande” y de entrar en el octavo lugar, cerró el certamen con el trofeo de campeón en mano.
“El equipo conforme entró a la liguilla agarró confianza y eso nos tiene acá con el campeonato. Después de una reestructuración, de un proceso nuevo, hubo siete u ocho incorporaciones al equipo y sabíamos que no iba a ser fácil”, expuso.
Valoró el buen trabajo que hizo la directiva y el técnico portugués Pedro Caixinha para complementar al equipo de buena forma, tras las diversas incorporaciones.
“Fue un gran acierto y quiero felicitar a la directiva y al técnico por confiar en tantos jóvenes, fuimos un equipo solidario en todo momento”, resaltó.
Manifestó que en el plantel lo vieron como el amuleto, al igual que su compañero Luis Ángel Mendoza, y es que en el certamen pasado fue campeón con América aunque después tuvieron una salida inesperada, pero por fortuna los festejos continuaron para ambos, ahora en Santos.
“Eso me dicen mis compañeros de que ‘Quick’ (Luis Mendoza) y yo eramos los amuletos del equipo por que ya habíamos ganado un campeonato, pero en ningún momento pensamos así, nosotros simplemente disfrutamos del juego y gracias a Dios los resultados se fueron dando en la liguilla”, expresó.
Señaló que algunos compañeros de las Águilas le enviaron la buena vibra para ganar la final contra Gallos Blancos de Querétaro. “Sí claro, tengo buena relación con muchos de mis ex compañeros y siempre me mandaron la buena vibra”.
Molina desea continuar en el cuadro coahuilense, “esperemos seguir aquí y conseguir títulos” y sin ser una obsesión sigue trabajando para algún día ser considerado por Miguel Herrera en la Selección Mexicana.
“Es un objetivo que todo jugador tiene en mente, es un orgullo representar a la selección, no me ha tocado, pero trabajo para estar ahí. No es una obsesión pero las cosas no se dan como uno quiere y hay que seguir trabajando”, refirió.