Miami.- Comentaristas deportivos estadunidenses consideran difícil que en estadios de la MLS se registren incidentes como los recientes en Boca Juniors (Argentina) y Jalisco, México, en donde brotes de violencia empañaron el espectáculo.
“La violencia puede pasar en cualquier parte del mundo, pero aquí hay cero tolerancia en un espectáculo deportivo, porque cualquiera que afecte las reglas del espectáculo va arrestado de manera automática”, dijo Andres Cantor, experimentado comentarista de futbol.
“En lo que ocurrió en Boca y en el estadio Jalisco, la Policía tiene miedo de reprimir que no aplica las leyes, son meros espectadores de la anarquía que reina en estos lugares”, opinó Cantor, de origen argentino y una de las personalidades más reconocidas del futbol de Estados Unidos.
“Incidentes pueda ocurrir acá, pero la gente sabe que si afecta el espectáculo o pone en peligro la integridad física de los jugadores va preso por un buen rato”, insistió el autor del libro “Gol una Celebración del Futbol” y comentarista de Telemundo y Futbol de Primera.
En uno de los mayores escándalos en la historia del futbol en América, la semana pasada un fanático de Boca Juniors, lanzó una preparación casera similar al gas pimienta sobre el túnel por la que salían los jugadores de River Plate a jugar el complemento del partido de vuelta por los octavos de final de la Copa Libertadores.
El juego fue suspendido. Días después, en el estadio Jalisco, en Guadalajara, durante el juego de cuarto de final del Torneo Clausura entre Chivas y Atlas, aficionados saltaron a la cancha y se enfrentaron con agentes de seguridad, lo que obligó a suspender por 18 minutos el encuentro.
“En Latinoamérica algunas veces las barras (porras) se escudan en el futbol para sacar temas sociales y utilizan el deporte como válvula de escape”, apuntó por su parte Luis Ernesto Berrera, comentarista de radio en “Tiro Libre con Barrera” del 1550 AM, en la Cadena Azul.
“En Inglaterra sucedió esto y se calmó porque las autoridades pusieron mano dura, identificando a los líderes de las barras”, señaló.
“Aquí se pueden dar casos aislados, pero son controlables, puede haber barras fuertes y groseras, pero mientras no se afecte físicamente a las personas es permisible”, agregó.
Incidentes menores
En juegos de la MLS, una liga que inició en 1996 con 10 equipos y hoy tiene 21, el incidente más violento se remonta a octubre del 2012, cuando aficionados del Galaxy de Los Ángeles fueron arrestados en un juego en el estadio Buck Shaw, luego de violentos altercados en las tribunas.
En esa ocasión lanzaron bombas de humo que fueron arrojadas al terreno en el medio tiempo.
Una de las plazas más difíciles es Salt Like City, de acuerdo con algunos guardametas, pues las tribunas en las cabeceras están muy cerca del terreno.
Los guardametas del Seattle Sounders FC Stefan Frei y Troy Perkins dijeron que esos aficionados son los más hostiles de la liga, pero mientras no entren en contacto físico con ellos todo está bien.
En un reciente incidente, aunque en un estadio de Toronto, Canadá, quedó clara la política de la MLS de cero tolerancia.
Cuatro aficionados del Toronto FC se acercaron y ofendieron a una reportera de CityNews el pasado fin de semana con palabras bruscas mientras entrevistaba a algunos aficionados.
Dos de los cuatro aficionados del Toronto, Ryan Hart y Shawn Simoes, están identificados y la liga anunció, en un comunicado, que planea vetarlos de los partidos de su equipo con una política de “cero tolerancia para este tipo de conducta, que encontramos completamente inaceptable”.