“¿Dónde está mi personal de seguridad?”, exclamó Blatter mientras el comediante británico Simon Brodkin le tiraba billetes falsos y le agradecía por la concesión ficticia de la Copa Mundial del 2026 a Corea del Norte. “Me complace hacer negocios contigo”, gritó Brodkin cuando era sacado del recinto.

Blatter renunció cuatro días después de su reelección en mayo, en medio de un escándalo derivado de las investigaciones que se llevan a cabo en Estados Unidos y Suiza de supuestos hechos de corrupción en el seno del organismo, pero sigue al frente de la FIFA a título interino. Entre las presuntas irregularidades que se investigan figuran la supuesta compra de votos por parte de Rusia y Catar, sedes de las copas mundiales del 2018 y 2022 respectivamente.

Las 209 federaciones nacionales miembros regresarán a Zúrich en febrero para elegir un nuevo presidente casi nueve meses después de la renuncia de Blatter, de 79 años y quien preside la FIFA desde 1998.

“El 26 de febrero la FIFA tendrá un nuevo presidente”, declaró Blatter durante la conferencia. “Yo no puedo ser el nuevo presidente porque soy el viejo presidente”.

Uno de los candidatos con mayores posibilidades es el presidente de la UEFA, Michel Platini. Otro potencial aspirante es el príncipe Alí bin al-Hussein, derrotado por Blatter en mayo. Pero ninguno de los dos ha declarado sus intenciones.

Platini se limitó a decir en un comunicado que “ahora tenemos una fecha concreta, lo que significa que podemos esperar una nueva conducción que seguramente aportará nuevas ideas y nuevas soluciones”.

Por ahora los únicos que han anunciado su intención de postularse son el ex internacional brasileño Zico y el presidente de la federación liberiana Musa Bility.

Blatter dijo que “lamentaba” la crisis que enfrenta la FIFA, pero que no “abandonará” la presidencia hasta que se elija un sucesor.

“Sigo siendo el presidente elegido por 133 asociaciones nacionales”, afirmó Blatter, añadiendo que hará lo posible por “recuperar el prestigio de la FIFA”.

El que se haya elegido el 26 de febrero para la votación es visto como una victoria política de Blattersobre la UEFA y otras confederaciones que creían tener un acuerdo para que el mandato del suizo concluyese el 15 de enero. Sin embargo, se decidió llevar a cabo la votación una vez concluido el Campeonato de Naciones Africanas, programado del 16 de enero al 7 de febrero.

“Estoy muy decepcionado”, declaró Bility a la Associatd Press por teléfono poco después del anuncio de la fecha. “No refleja la gravedad de la situación que enfrentamos al tratar de revivir a la FIFA”.

Bility se mostró confiado respecto a sus posibilidades. “Se mencionan varios posibles candidatos y no veo caras nuevas. Son las mismas figuras que están dando vueltas desde hace años”.

El príncipe Alí se sumó al lunes a quienes piden que Blatter sea excluido del proceso de renovación en vista de los escándalos que marcaron su gestión.

“No se pude permitir que (Blatter) planifique su sucesión y maneje el proceso con miras a las elecciones”, sostuvo en declaraciones a la AP.

“La renuncia del presidente Blatter no se puede prolongar más. Debe irse ya y se debe instalar una conducción independiente que maneje las elecciones y las reformas que se están estudiando”, agregó.

En respuesta a pedidos de patrocinadores como Coca Cola y a recomendaciones de la agrupación Transparencia Internacional, Blater nombró un panel dirigido por una persona independiente que supervisará las reformas de la FIFA.

Esa comisión incluirá dos representantes de Asia, Africa, Europa y la CONCACAF, y uno de Sudamérica y de Oceanía.