En compañía de familiares y amigos, la cantante Mariah Carey recibió esta semana su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood.
Para el caluroso homenaje, la artista lució como una auténtica diva con un vestido largo y ceñido de color negro, forrado en lentejuelas y con escote por delante y por detrás. Complementó su “look” con ondas en su cabello y gafas de sol.
Fue el miércoles pasado cuando Carey develó la estrella 2,556 de la aclamada avenida hollywoodense, uno de los reconocimientos más importantes que ha recibido en sus 25 años de carrera.
La ceremonia tuvo dos coprotagonistas inesperados: Monroe y Moroccan, los gemelos que la cantante tuvo con su exmarido Nick Cannon.
Los pequeños de cuatro años de edad llamaron la atención todo el rato, especialmente Moroccan, quien estalló en llanto llorar cuando sus niñeras lo apartaron de su mamá al momento de la sesión fotográfica.
Exitosa carrera
Con más de 200 millones de álbumes vendidos y 21 premios Grammy, Carey es una de las cantantes más prolíficas de las últimas décadas.
En sus casi tres décadas de trayectoria musical, ha grabado canciones tan famosas como “Always Be My Baby”, “Fantasy”, “Heroe” y “We Belong Together”.