Preocupado por la gente que padece su misma enfermedad, Mielodisplasia, Gonzalo Vega creó su propia fundación “Gonzalo Vega, A.C.” para apoyar a la gente de bajos recursos.
El actor, quien se está atendiendo de la enfermedad, pero tardó mucho en encontrar un buen diagnóstico, señaló que el problema para los enfermos no es tanto la atención, porque el Instituto Nacional de Nutrición, es un hospital público que cobra de acuerdo a los recursos, el problema es que hay enfermos que necesitan de apoyos económicos para poder llegar ahí y atenderse como es debido.
“Si bien es cierto que esta enfermedad se atiende en el Instituto Nacional de Nutrición, que es muy democrático, porque ahí lo mismo atienden a gente ilustre como Gabriel García Márquez, que a gente que no sabe leer ni escribir, todos estamos en la misma sala de espera a que nos atiendan los mismos médicos, pero también es cierto que ahí puedes estar tres, cuatro, horas, y hay gente que no tiene para desayunar, para pagar un taxi, y que son de otros estados de la República y tienen que irse a la TAPO (terminal de autobuses foráneos) y es a los que tratamos de amparar con alguna ayuda”, explicó el actor.
Para aumentar lo recursos de su fundación, Gonzalo realizará una función de su obra teatral “La Señora Presidenta”, a la que espera vaya mucha gente con un deseo que vaya más allá de divertirse “con el deseo de ayudar”
“Cuando uno tiene la necesidad de ir a un hospital por, desafortunadamente, una enfermedad o acompañando a alguien, nos damos cuenta que ahí todos están para ayudar, en abril del año pasado fui al hospital y me puse malísimo ahí en la sala de espera, y un señor se asustó mucho y se movilizó para que me atendieran rápido, es gente muy generosa, yo gracias al público tengo lo poco o mucho, y creo que con parte de nuestro trabajo, podemos beneficiar a quienes no pueden solventar toda la enfermedad”.
En esta lucha, con la ayuda del doctor J. Xavier López Karpovitch, también quiere dar orientación a los enfermos para un buen seguimiento de su tratamiento, ya que esta es una enfermedad para toda vida y no hay que bajar la guardia, porque cuando se cree uno recuperado, vuelve, como le pasó a él “lo importante es no dejar de atenderse nunca y seguir al pie de la letra las instrucciones de los médicos”.
Agregó que hay mucha falta de información acerca de este padecimiento, que incluso a él le ha perjudicado como actor, porque algunos productores piensan que está muy grave o no puede trabajar y dejan de llamarlo, pero eso es mentira, la enfermedad está ahí, pero se puede controlar.