Aunque nació en Estados Unidos, Henry habla un fluido español y se ha convertido en fuente de inspiración para muchos jóvenes. Foto: Especial
Phoenix.- El medallista de oro Olímpico y orgullo de Phoenix, Henry Cejudo, ha dado de qué hablar en la UFC, en donde se mantiene invicto.
El ex luchador grecoromano de origen mexicano viene de vencer a Jussier “Formiga” da Silva, convirtiendose así en el contendiente No. 1 para disputar el título en la división mosca.
Con una potencial pelea contra Demetrious Johnson en juego, Henry Cejudo se enfrentó a Jussier Formiga en una muy entretenida pelea en el evento UFC Fight Night en Monterrey, México hace unos días.
Cejudo fue capaz de superar a Formiga para recibir una victoria por decisión dividida, una que pareció no importarle al campeón, quien se encontraba sentado en la arena.
Como parece ser su nueva costumbre Cejudo decidió mantener la pelea de pie, donde encontró un notable éxito demostrando en el proceso un muy mejorado nivel de golpeo. Su estrategia se mantuvo hasta el tercer asalto, en donde consiguió un enorme derribe.
Con la victoria Cejudo mantiene su récord invicto mientras que Formiga pierde su racha de tres victorias consecutivas.
Aunque nació en Estados Unidos, Henry habla un fluido español y se ha convertido en fuente de inspiración para muchos jóvenes.
A sus 21 años de edad se convirtió en campeón olímpico en estilo de lucha (55 kilos) en los Juegos que se celebraron en Beijing 2008.
Al igual que en su infancia, Cejudo vino de atrás en la mayoría de sus combates en territorio chino, sólo en la Final contra el japonés Tomohiro Matsunaga fue capaz de irse arriba en los dos primeros periodos de combate, pero en los anteriores se tuvo que sobreponer a inicios adversos.
Intentó clasificar para los Juegos Olímpicos de Londres 2012, pero perdió en las eliminatorias y en señal de retiro del deporte amateur, lanzó sus zapatillas de la colchoneta.
Actualmente, el peleador de raíces mexicanas tiene marca invicta de 10-0, y aunque su fuerte es la lucha a ras de lona, es una gema escondida en el boxeo, algo que ha sorprendido a muchos de sus primeros rivales.