La potosina va encaminada a ser historia en la temporada 2015-2016, ya que de mantener el ritmo será su séptimo año como número uno, por lo que igualará la mejor marca de todos los tiempos que tiene la estadunidense Michelle Gould.

La temporada pasada, aunque se reafirmó como la mejor, no estuvo perfecta pues perdió su racha invicta y cedió tres títulos, mientras que se llevó otros 10, pero tiene un arranque totalmente diferente.

Longoria comenzó por llevarse el Cali Open a finales de agosto, luego participó en un torneo al aire libre en Las Vegas, Nevada, Estados Unidos, que también ganó y conquistó. Además consiguió en 2015 su sexto Abierto de los Estados Unidos, el quinto de forma consecutiva.

La jugadora también conquistó sus dos torneos donde fue anfitriona, primero el Paola Longoria Experience en San Luis Potosí, donde se alzó campeona en singles y firmó su tercer título de dobles en el año y luego apenas unas semanas después también hizo suyo el Paola Longoria Invitational, celebrado en Monterrey, Nuevo León.

Para cerrar el año, se llevó el Clásico de Navidad en Virginia, Estados Unidos, donde también tuvo doblete en singles y dobles pero ahora no con su pareja habitual, Samantha Salas, sino con Alexandra Herrera.

Para poner la cereza del pastel, Longoria también reafirmó su dominio Panamericano al convertirse en bicampeona de nueva cuenta del triplete, tras ganar singles, dobles y por equipos ahora en Toronto 2015.

De esta manera, alargó su reinado que inició en Guadalajara 2011, donde tuvo los mismos logros, con lo que despide el año en lo más alto y apunta a acrecentar su leyenda dentro de la cancha.