Phoenix.- El mariscal de campo Carson Palmer se mostró plenamente recuperado de su lesión en la rodilla, en la apertura de los mini-campos de entrenamiento de su equipo, Cardenales de Arizona, el martes en el Estadio de la Universidad de Phoenix.
Con los entrenamientos obligatorios empezando, Palmer hizo presencia en el campo para realizar entrenamientos de 11 contra 11 por primera vez desde que se lesionó en noviembre pasado.
El estelar pasador se desgarró el ligamento cruzado anterior izquierdo el pasado 9 de noviembre, en la victoria de su equipo por 31-14 sobre Carneros de San Luis, que lo marginó de los emparrillados durante casi siete meses.
En aquel entonces, Palmer manifestó su esperanza por volver a las canchas para el inicio de las actividades organizadas de equipo, lo cual consiguió y ahora se encuentra en plena forma para tomar parte de los primeros entrenamientos con escuadras completas.
No obstante, pese a que mostró estar en buena condición física y a que el entrenador en jefe Bruce Arians aseguró que ya le habían “quitado las rueditas de seguridad”, el quarterback se mostró cauteloso al señalar que éste es un paso más en el camino de su rehabilitación.
“Esto es sólo uno de muchos pasos en un largo camino, ésta era la meta desde el principio. Es sólo una meta conseguida entre muchas, hay muchas metas mayores y cierta cantidad de metas por alcanzar” de cara a la temporada 2015 de la NFL, advirtió.
De su proceso de recuperación indicó que después de este tipo de cirugía “tienes que empezar con el proceso de caminar, con el de trotar con el de correr, le re-enseñas al pie, a la rodilla, a la pierna la técnica a través de cada uno de esos pasos”.
Dijo que es lo mismo con su proceso de volver al juego, ya que tiene que volver a adquirir las técnicas para correr y los pasos que necesita dar antes de mandar un pase; no obstante, aseveró que “estoy en donde esperaba y sabía que tendría mucho trabajo que hacer cuando llegara aquí”.
También, admitió que ésta será la primera prueba de verdad sobre su condición ya que “aquí es cuando te das cuenta, cuando las balas están volando y las cosas van a toda velocidad, los ángulos y las profundidades, tus pasos en el juego de carrera, pero es lo que esperas”.
Por su parte, el coach Arians evaluó de manera positiva a su pupilo al decir que “se movió bien, sin dudarlo. Yo lo dudé en un par de ocasiones, cuando vi algunos muchachos caer enfrente de él”.