Washington.- El primer debate entre los aspirantes republicanos a la Presidencia de Estados Unidos concluyó esta noche sin ganadores claros, aunque Donald Trump se mantuvo en el centro de la atención.
A lo largo de las dos horas del debate en la Arena Quickens Loan, en Cleveland Ohio, el millonario empresario de bienes raíces fue blanco frecuente de preguntas de los moderadores, al igual que el ex gobernador de Florida, Jeb Bush.
Por momentos, los moderadores buscaron confrontar a Bush con Trump, aunque sin éxito debido a la renuencia del primero a mantener en este foro las criticas vertidas contra el empresario, sobre todo después de sus comentarios denigrantes sobre los inmigrantes mexicanos.
Bush incluso negó haber utilizado un epíteto para referirse a Trump, quien reiteró por su parte algunas de sus aseveraciones sin presentar pruebas para sustentarlas.
Trump se negó igualmente a prometer en este foro —como se lo demandó uno de los moderadores—, que no contenderá por la Presidencia como candidato independiente en caso de perder la contienda interna republicana.
“Eso es algo que no puedo prometer en este momento”, dijo ante la insistencia de su interrogador.
El magnate se rehusó igualmente a retractarse por las ofensivas palabras que ha utilizado para referirse a los inmigrantes o las mujeres, asegurando que sus comentarios “son divertidos y graciosos”.
Trump defendió el uso de las leyes financieras para declararse en bancarrota en cuatro ocasiones, resultando en la pérdida de cientos de millones de dólares para sus inversionistas, y se justificó al insistir que no es único que usa las leyes para su provecho.
Bush por su parte defendió su propuesta migratoria y la necesidad de que exista una reforma que brinde a los inmigrantes la posibilidad de regularizar su situación, en tanto que Trump reiteró su postura de construir un muro “con una puerta bonita” para la migración legal.
Aunque el formato establecido por la cadena Fox anticipaba que los 10 candidatos tendrían tiempos similares de intervención, Trump y Bush tuvieron más intervenciones y consumieron más tiempo que el resto.
Fuera de ellos dos, el senador por Kentucky, Rand Paul, y el gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, tuvieron espacios de tiempo considerable, al igual que el ex gobernador de Arkansas Mike Huckabee.
Otros como el senador por la Florida, Marco Rubio, y los gobernadores de Wisconsin, Scott Walker, y de Ohio, John Kasich, tuvieron intervenciones limitadas. El senador Ted Cruz y el neurocirujano Ben Carson pasaron prácticamente desapercibidos.