San Luis Río Colorado, Son.- Ya limpios, ayudan a otros ciudadanos a evitar que sean víctimas de las adicciones, y así se gradúan en la labor de prevención del abuso de las drogas, en esta parte de la frontera entre Sonora y Arizona.
Sin este trabajo social sería muy difícil que las acciones del sector público alcanzaran a todos los estratos de la población.
Roberto “N”, de 43 años de edad, adicto a la heroína en recuperación y tratado en el Centro de Integración y Rehabilitación para Adictos (CIRA), trabaja en un taller mecánico, y participa en pláticas dirigidas a los jóvenes para que eviten las drogas.
Esas pláticas de prevención de adicciones han llegado a los alumnos del Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y de Servicios (CBTIS) Número 33, entre otras escuelas del nivel secundaria y preparatoria, para que los jóvenes no sean víctimas de las drogas.
El programa pretende ser un dique ante el aumento de consumidores, quienes cada vez a menor edad se ven involucrados en el uso y consumo de estas sustancias.
El director del CBTIS Número 33, Emilio Reséndiz Ruiz, dijo que “Yo no abandono”, es el plan general promovido por el gobierno federal, enfocado a evitar la deserción escolar que se da por diversas causas, entre ellas el consumo de drogas entre la juventud.
Durante las graduaciones escolares, personal del Departamento de Atención a la Juventud (DAJ) local, alerta a jóvenes sobre los riesgos de consumir bebidas con contenido alcohólico y a la vez conducir algún vehículo de propulsión motriz en estas fiestas de fin de cursos.
Con la frase “Que no seas tú otra mala noticia”, la coordinadora del DAJ, Monserrat Ponce Franco, platicó con estudiantes del Colegio de Bachilleres del Estado de Sonora (Cobach), al término de la ceremonia de graduación.
Insistió en que los jóvenes escojan a un conductor designado que garantice que todos los que salgan a celebrar a los antros o salones sociales, lleguen salvos a sus hogares.
“No queremos que tú seas parte de las estadísticas, te invitamos a celebrar con responsabilidad, a evitar que el conductor del vehículo en que viajes lo haga bajo los influjos de bebidas alcohólicas. Ayúdanos a no ser una mala noticia”, dijo la funcionaria municipal.
Durante la entrevista con los estudiantes, Ponce les entregó folletos con recomendaciones para no lamentar más accidentes de serias consecuencias, como los que se han presentado en las últimas semanas.
También en Yuma
También en el vecino condado de Yuma, Arizona, se dan estas pláticas, talleres, conferencias y acercamientos con los jóvenes, como es el caso de la ofrecida por el ex convicto Javier Romero, en diversos planteles educativos.
Durante el foro Padres Unidos Contras las Drogas, el residente de San Luis, Arizona habló por primera vez de su caso que terminó en una prisión estatal, en Tucson, de donde salió hace apenas cinco meses.
“Fue algo muy fuerte entrar a la Corte con el traje anaranjado, todo esposado. Me sentenciaron a cinco años de cárcel de los cuales hice cuatro. Cuando llegas a prisión no se acaban la drogas, al contrario, hay más droga y mucho negativismo. Te puedes enganchar en ese ambiente”, expuso.
La carrera en el tráfico de drogas inició para Javier a los 16 años de edad, influenciado por sus amigos en la preparatoria local, a quienes describió como jóvenes normales, pero ya enganchados en el negocio y a quienes siguió por ganar un dinero fácil.
Todo transcurrió bien en el negocio por varios años, hasta la edad de 19, cuando fue arrestado por primera vez al tratar de cruzar por la garita internacional con marihuana y el castigo fue un año de cárcel y un período de libertad condicional hasta que fue liberado y pensó en rectificar su vida.
“Me dije que eso no era vida, que había hecho sufrir mucho a mi familia. Me alejé de eso por buen tiempo, pero después pasé una época difícil, económica y sentimentalmente. Me quedé en la calle, pasé por una serie de problemas, uno tras otro, no miraba una salida y tomé la más fácil, sacar dinero volviendo a pasar droga, por no batallar”.
Manifestó que esa fue su vida de entrar y salir de prisión, hasta que se encontró con los grupos de ayuda, con los cuales colabora en la actualidad.
Para reforzar estas acciones, en las recientes reuniones de la Comisión Binacional San Luis Río Colorado-Yuma y el Consejo Binacional de Salud, se coordinaron más actividades que se realizarán de manera simultánea en ambos lados de la frontera.