A pesar de que la primavera inició el sábado a las 22:30 horas, muchos se preparan para recibir equinoccio mediante diferentes rituales en espera de recibir “buenas vibras” y “energía nueva”.
Y es que, independientemente de las creencias religiosas o culturales, una costumbre arraigada en la humanidad desde el inicio de la civilización es precisamente el comienzo del ciclo en el que termina el invierno y la tierra se regenera.
Es por ello que a pesar del avance de la ciencia y el conocimiento de la humanidad, prevalecen las tradiciones que llevan al hombre moderno a voltear atrás para rescatar estas costumbres primitivas en espera de “renovar sus espíritus” torturados por la modernidad.
Tal es el caso de Cecilia Castro, quien como cada año acude vestida de blanco con su marido a los diferentes centros prehispánicos para “recargarse de energía” con el ingreso de Kukulcán para renovar la fertilidad de la tierra.
“Ahora nos toca ir a Chichén Itzá, el año pasado estuvimos en Teotihuacán pero fue triste porque había mucha gente que solo iba a echar relajo”, comentó mientras carga sus maletas rumbo a este destino, aprovechando el inicio del periodo vacacional de Semana Santa.
Otras personas también acostumbran realizar actividades y que no son necesariamente para “recargarse de energía”, sino para iniciar un nuevo ciclo, en la búsqueda de fortuna, pareja, un mejor trabajo o un cambio radical en sus vidas.
Es por ello que lugares como el Mercado de Flores de Nuevo Xochimilco, frente al Canal de Cuemanco, se abarrotan de gente que acuden a comprar flores y plantas, cada una con atributos diferentes “para iniciar el nuevo ciclo”.
Asimismo no faltan quienes acuden a hacerse “una limpia”, para lo cual recurren a lugares tradicionales como a un costado de la Catedral Metropolitana, donde los concheros (danzantes prehispánicos) aprovechan la ocasión para hacer sus rituales de primavera.
“Yo no me pierdo mi limpia de primavera”, revela doña Flor quien acaba de ser aporreada con hierbas y llena de humo por un chaman con lo que ella asegura haber dejado atrás “todas las malas vibras de invierno.
Otros más simplemente se limitan a vestir de blanco, ya sea con el fin de absorber las energías buenas o “por si las moscas”, como comentan un grupo de jóvenes que pasea por la plancha del Zócalo riendo al ver los rituales hechos por los concheros.
“Dicen que es para atraer las buenas vibras, pero yo no creo en eso, aunque más vale, por si las moscas”, comenta Adriana mientras sus compañeros se burlan de ella y comentan entre risas: “Pero si tú fuiste quien propuso que nos vistiéramos todos de blanco”.
De esta manera, entre hoy y mañana, miles de mexicanos acudirán a diferentes lugares para recibir, mediante diferentes rituales, la llegada de la Primavera 2016.