México.- El gobierno de México presentó el jueves las reglas que permitirán a empresas nacionales y extranjeras participar por primera vez en la exploración de crudo, luego de una histórica reforma energética que terminó con más de siete décadas de monopolio estatal.
Las autoridades anunciaron el inicio del proceso de licitación para 14 áreas en el Golfo de México, que se extenderá hasta el 15 de julio del 2015 con la presentación de propuestas económicas y en el que podrán participar todas las empresas privadas que cumplan con ciertos requisitos, por ejemplo comprobar su participación en al menos tres proyectos de exploración y extracción de crudo por un valor de al menos 1.000 millones de dólares y que tenga un capital contable de al menos la misma cantidad.
Las 14 áreas o bloques se encuentran en aguas someras, menores a 500 metros de profundidad, frente a los estados de Veracruz, Tabasco y Campeche. Los bloques serán explorados a través de contratos de producción compartida con una vigencia de 25 años, que podrá prorrogarse por dos periodos de cinco años cada uno.
Las empresas interesadas podrán participar solas o en un consorcio, aunque no podrán postular por más de cinco bloques, que tienen extensiones desde 116 hasta 500 kilómetros cuadrados.
Con el anuncio de las reglas comienza a concretarse la reforma energética aprobada este año y que puso fin a una época que se inició en 1938 cuando se nacionalizó la industria petrolera.
Antes de la reforma, la empresa estatal Petróleos Mexicanos era la única que podría explorar y producir crudo.
Los interesados tendrán acceso por seis meses a un llamado “cuarto de datos”, un sitio en internet en el que se pondrá a disposición toda la información disponible sobre cada área, por ejemplo información sísmica y geográfica.
“Es mucho lo que México se juega en esta audaz apertura”, dijo el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell. “Por ello, es definitivo el compromiso del Estado mexicano con la transparencia”, aseguró.
La subsecretaria de Energía Lourdes Melgar afirmó que hay una cláusula en la que se establece que cualquier soborno o acto de corrupción será motivo para rescindir los contratos.
El tema de la corrupción ha resurgido en las últimas semanas en México, luego de que policías detuvieran y ayudaran a desaparecer a 43 estudiantes por órdenes de un alcalde, en un caso que mostró los vínculos de autoridades y el narcotráfico.
A eso se sumó un presumible caso de conflicto de interés porque la primera dama adquirió hace tiempo una mansión propiedad de un empresario que ha recibido contratos públicos y que era parte de un consorcio que recientemente ganó una licitación del primer tren rápido en México, la cual se canceló posteriormente.
Las autoridades dijeron que todos los contratos y procesos de adjudicación de contratos petroleros serán públicos para evitar casos de corrupción.
La producción de gas y petróleo de México alcanzó su máximo en 2004 con 3,4 millones de barriles diarios. Ha caído desde entonces a unos 2,4 millones de barriles. Con la reforma, el gobierno prevé incrementarla a tres millones de barriles para 2018 y a 3,5 millones para 2025, apoyado en la experiencia y tecnología de compañías extranjeras.
El gobierno considera que la reforma tiene el potencial de transformar el desarrollo económico del país. Analistas estiman que las inversiones podrían alcanzar los 15.000 millones de dólares anuales.