México.- Ethan Couch, el llamado joven “affluenza”, partió de la ciudad de México con destino a Texas, donde es buscado por violación a su libertad condicional.
El Instituto Nacional de Migración señaló en un comunicado que Couch salió en un vuelo comercial con destino a Dallas, donde será recibido por autoridades estadounidenses.
Couch fue detenido en diciembre junto a su madre en el balneario turístico de Puerto Vallarta e inicialmente solicitó un amparo para evitar ser deportado a Estados Unidos. Su madre Tonya Couch fue enviada a territorio estadounidense y está en libertad bajo fianza.
El joven desistió esta semana del amparo, lo cual permitió deportarlo.
El caso de Couch atrajo la atención y la burla nacional después de que fuera sentenciado a 10 años de libertad bajo palabra en 2013 por un accidente fatal. Couch conducía ebrio, chocó su camioneta y causó la muerte de cuatro personas. Varias otras resultaron heridas, incluidos pasajeros que iban con él.
Un testigo de la defensa argumentó que Couch había sido malcriado por sus adinerados padres, un problema que un experto definió como “affluenza”. Dicho problema no está reconocido como un diagnóstico médico por la Asociación Psiquiátrica de Estados Unidos y el hecho de que haya sido mencionado atrajo burlas.
Un video divulgado por las autoridades migratorias mostró a Couch con una sudadera y barba mientras firmaba un documento en el centro de retención migratorio de la capital mexicana donde permaneció por casi un mes.
Luego se lo vio mientras era escoltado fuera del centro de retención por agentes migratorios mexicanos uniformados y luego dentro del avión.
El abogado mexicano del joven, Fernando Benítez, dijo que Couch ratificó el lunes su decisión de no apelar.
Las autoridades estadounidenses consideran que Tonya Couch y su hijo de 18 años huyeron de Texas en diciembre cuando los fiscales investigaban si el joven había violado las condiciones de su libertad condicional luego del choque en 2013. Madre e hijo fueron arrestados en Puerto Vallarta cuando un pedido telefónico de pizza alertó a las autoridades sobre su paradero.
Tonya Couch está acusada de impedir el arresto de un delincuente y podría ser condenada a 10 años de prisión de ser declarada culpable.
Al regresar a Texas, Couch será recluido en un centro de detención juvenil. Un juez de atención de delitos cometidos por menores de edad realizará una audiencia para decidir si el acusado continúa detenido ahí, si debe ser trasladado a una cárcel para adultos o si será puesto en libertad, dijo Dee Anderson, jefe de la policía del condado de Tarrant.
Está agendada otra audiencia para el 19 de febrero en la que se determinará si el caso de Couch es transferido al sistema de adultos. Si esto último ocurre y Couch viola nuevamente las normas de su libertad condicional, podría enfrentar hasta 10 años de prisión por cada muerte provocada.