Washington.- La medida del presidente Barack Obama para endurecer el control sobre la venta de armas podría desalentar a algunos vendedores privados sin licencia de realizar negocios vía internet y en exhibiciones, pero la Casa Blanca y otros expertos no pueden especificar cuántas transacciones serán bloqueadas ni cuánto derramamiento de sangre se evitará.
“Tiene un impacto potencial, aunque es difícil pronosticar a qué grado o de qué tipo”, dijo Susan Sorenson, una profesora de la Universidad de Pennsylvania que estudia la prevención de la violencia. “Y es muy importante reconocer que no podemos tener sólo un cambio y esperar que eso altere las cosas radicalmente”.
El presidente utilizó su autoridad ejecutiva para aclarar que cualquiera persona “en el negocio” de vender armas debe obtener una licencia federal y realizar revisiones de antecedentes a posibles compradores, sin importar dónde se realice la venta. Actualmente, muchos de los vendedores privados no se molestan en obtener licencias, y la venta de armas por internet se ha convertido en un floreciente negocio.
Los nuevos controles probablemente no habrían evitado muchos de los grotescos tiroteos en el país que han provocado el llamado a que se apliquen leyes de armas más estrictas, y podrían afectar a apenas una pequeña fracción de las 30.000 muertes por armas de fuego que se registran anualmente en Estados Unidos. Los estudios en la última década demuestran que es más probable que los delincuentes obtengan las armas de amigos u otros vínculos sociales que en exhibiciones de armas o mercados de artículos usados.
El presidente también hizo un llamado a la contratación de más de 230 examinadores adicionales y demás personal para procesar las millones de solicitudes de revisión de antecedentes que se reciben anualmente.