Washington.- El secretario del Departamento de Seguridad Interna (DHS), Jeh Johnson, rechazó el miércoles la propuesta de un legislador republicano para construir un muro en toda la frontera con México y así prevenir la entrada de los niños centroamericanos.
“Mi recomendación es que el uso más eficiente y efectivo de nuestros recursos es una estrategia basada en riesgos. No creo que construir un muro en toda la frontera suroeste es un uso apropiado de recursos de los contribuyentes”, dijo el funcionario.
“Si construyo un muro de 15 pies de altura, alguien va a construir una escalera de 16 pies”, remató en una audiencia del Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes.
Johnson reaccionó así al comentario del legislador republicano y exgobernador de Carolina de Sur, Mark Sanford, quien sugirió que un muro en toda la frontera sur de Estados Unidos podría evitar que los menores pudieran “entregarse” a las autoridades migratorias.
En respuesta, el secretario del DHS señaló la respuesta de Estados Unidos a la crisis de niños migrantes fue dejar en claro que los migrantes potenciales serían detenidos y repatriados.
“Así es que reforzamos nuestra capacidad de enviar a la gente a sus países de origen más rápidamente (y) nos embarcamos en una agresiva campaña de mensajes públicos sobre los peligros (del viaje)”, señaló Johnson.
El titular de seguridad interna de Estados Unidos reclamó, sin embargo, al Congreso por no haber aprobado la petición de emergencia de 3.7 mil millones de dólares hecha por el presidente Barack Obama para lidiar con la crisis de niños migrantes.
“Necesitamos un socio en el Congreso y no lo tuvimos este verano. Pedí dinero para pagar a nuestros esfuerzos de seguridad fronteriza y no obtuvimos ayuda”, indicó.
Johnson aludió al hecho de que el mes pasado los republicanos de la Cámara de Representantes aprobaron una iniciativa de ley fronteriza que incluyó apenas 694 millones de dólares para responder a la crisis de niños migrantes, y que aún no pasa en el Senado.
El proyecto de ley republicano asignó sólo una fracción de la solicitud presidencial para albergar a los niños y en cambio plantea acelerar la repatriación de los menores, la mayoría procedente de Honduras, El Salvador y Guatemala.
Pero desde entonces tanto las detenciones de niños migrantes sin acompañantes, así como las de aquellos que viajan con adultos cayeron en agosto pasado a su nivel más bajo desde febrero de 2013, según el DHS.